INTRODUCCIÓN

Los tumores originados en la glándula lagrimal son relativamente raros, representan 5% a 7.5% de todos los tumores intraorbitarios^1-3. El adenoma pleomorfo es considerado un tumor benigno de carácter mixto, representa un cuarto de todos los tumores que afectan a la glándula lagrimal⁴. Afectan con mayor frecuencia al lóbulo orbitario y se manifiestan entre la tercera y séptima década de la vida. Su incidencia es levemente mayor en hombres lo cual representa el 60%⁵.Además de la sospecha clínica, es imperiosa la realización de estudios de imágenes^6,7. La tomografía computarizada representa una herramienta fundamental a la hora de la toma de decisiones en cuanto al tratamiento quirúrgico⁸. El diagnóstico definitivo lo aporta la histología por medio de la resección completa. Por lo tanto, la sospecha clínica preoperatoria es importante para su adecuado tratamiento^9-11.

Caso Clínico

Varón de 68 años de edad, acude por tumoración en región orbitaria, superoexterna derecha hace 1 año, agregándose dolor. Se observa ligera ptosis palpebral a expensas de una masa en el ángulo superoexterno de orbita derecha, móvil, no dolorosa a la palpación. No se acompaña de afectación de la agudeza visual (Figura 1). La tomografía revela presencia de tumoración limitada al ángulo superoexterno de orbita sin desplazamiento del globo ocular (Figura 2). Ante la sospecha de una tumoración de glándulas lagrimales considerando además la posibilidad de la compatibilidad de un tumor desmoide, se interviene quirúrgicamente al paciente constatándose tumoración en ángulo superoexterno de orbita derecha de 1 cm de diámetro (Figura 3 y Figura 4). Se procede a la exéresis del tumor, la misma es enviada a patología la cual reporta la compatibilidad con un adenoma pleomorfo de glándula lagrimal del lado derecho (Figura 5 y Figura 6). El paciente presenta evolución satisfactoria. El seguimiento a cuatro meses no aporta recidiva.

Figura 1: Tumoración de orbita superoexterna derecha. 

Figura 2: Tomografía computada donde se observa tumoración en región superoexterna de orbita derecha.  

Figura 3: Identificación de tumoración de angulo superoexterno de orbita derecha. 

Figura 4: Exéresis de tumoración  

Figura 5: Tumoración compatible con glandula lagrimal.  

Figura 6: Tumoración de orbita donde puede observarse el parénquima de características benigna 

DISCUSIÓN

Los tumores ubicados en la región orbitaria, sobretodo los relacionados al ángulo superoexterno, deben tener una consideración especial, ya que muchas veces puede ser tratados como tumores desmoides obviandose la posibilidad de la existencia de un tumor de glándula lagrimal^5,7,9.En general los tumores desmoides o quistes de cola de ceja se acompañan de una historia asociada a la infancia. En este caso presentado, la tumoración se ha puesto de manifiesto en la sexta década, lo cual lleva a la sospecha del diagnostico diferencial de la tumoración de glandula lagrimal^4-7.

El hallazgo de una tumoración bien circunscripta, lleva a la sospecha de una lesión benigna, lo cual lleva a la exeresis total de la misma. La anatomía patológica confirma el diagnostico del adenoma pleomorfo de glándula lagrimal. Es de gran importancia la utilización de una prolija técnica quirúrgica para no dañar la capsula tumoral, así́ como también el seguimiento del paciente^9,10.

CONCLUSIÓN

Considerar los diagnósticos diferenciales de tumoraciones en el ángulo superoexterno de la órbita es una herramienta útil tanto para el interrogatorio, examen físico y uso adecuado de métodos auxiliares; como para el tratamiento adecuado de los mismos.