INTRODUCCIÓN
El gusano del melón, Diaphania hyalinata (Linnaeus) (Lepidoptera: Cambridae) se reporta durante los meses de verano para algunos estados de Norteamérica (Brou, 2016), en forma permanente en Centroamérica, Sudamérica, el Caribe (Saunders, Coto y King 1998) y Paraguay (PYBIO, 2018). En Venezuela, D. hyalinata está registrada para los estados Amazonas, Aragua, Bolívar, Carabobo, Distrito Capital, Falcón, Guárico, Lara, Mérida, Miranda, Portuguesa, Táchira, Trujillo, Yaracuy (Clavijo-Albertos y Arias-Celis, 2017). Es una especie fitófaga que consume el follaje sin atacar la nervadura de la hoja y raspa la superficie del fruto, prefiere como hospedante el calabacín (Curcubita pepo L.) y se le considera el principal insecto plaga de las cucurbitáceas en el estado de Florida, USA (Capinera, 2017b). En Venezuela, se reporta como insecto plaga en el cultivo de melón para los estados Lara y Zulia (Geraud-Pouey, Chirinos, Peña y Arcilla, 1998; Salas, 2011).
El barrenador del pepino, D. nitidalis (Stoll) (Lepidoptera: Cambridae) en su estado adulto es una polilla que se encuentra distribuida a lo largo del continente desde el sureste de los Estados Unidos de América, Costa Rica, Perú, Brasil hasta Argentina (Brito, Costa, Maziero, Brito é Dörr, 2004), (Cordo, Logarzo, Braun y Di Lorio, 2004; Janzen & Hallwachs, 2009; Arévalo, 2016, VanDick, 2018).
Se ha evaluado la preferencia de alimentación de larvas del barrenador, empleando hojas de cucurbitáceas silvestres como Melothria pendula L. y Momordica charantia L. (Cucurbitaceae). Las larvas alimentadas con M. pendula tuvieron un adecuado desarrollo, mientras que con M. charantia no sobrevivieron (Elsey, Pena & Waddill, 1985). D. nitidalis se reporta en cultivares de calabazas y calabacines como hospedantes apropiados y en M. pendula como el principal hospedante silvestre de la especie en el estado de Florida, USA (Capinera, 2017a). En Venezuela, D. nitidalis se encuentra entre los insectos plagas reportados en el cultivo de melón (Cucumis melo L.) y pepino (Cucumis sativus L.) (Salas, 2011; Acevedo et al., 2012; Ruíz y Russián, 2017).
El pepino de culebra (M. pendula) es una de las 12 especies del género Melothria L. (The Plant List, 2013). Es una enredadera rastrera o trepadora que se encuentra en todo el continente desde el sureste de los Estado Unidos de América, México, Colombia, Brasil hasta Argentina (Flora do Brasil, 2017; Instituto de Ciencias Naturales, 2017; Flora Argentina, 2018; Centro de Investigación Científica de Yucatán, 2018; USDA, 2018). En Venezuela, se ha reportado su presencia entre 100 a 1600 msnm, en los estados Amazonas, Apure, Aragua, Barinas, Carabobo, Delta Amacuro, Distrito Capital, Falcón, Guárico, Lara, Mérida, Miranda Monagas, Nueva Esparta, Sucre, Táchira, Trujillo, Yaracuy, Zulia (Hokche, Berry y Huber, 2008) y Cojedes (Delascio-Chitty y López, 2007). Produce un fruto que semeja una patilla o pepino en miniatura, sub-globoso hasta elipsoidal, apiculado, de 1 a 3 cm de largo y 0,8 a 2 cm de ancho, de color verde en la fase inmadura, negro o purpúreo obscuro estando maduro (Schnee, 1984; Lira, 2001). Estudios bromatológicos indican que es una especie silvestre no domesticada con potencial para ser empleada en la alimentación humana por el agradable sabor de sus frutos y contenido de 56,8% de carbohidratos y 12,6% de proteínas (Arzate-Fernández y Grenón-Cascales, 2002).
En la presente investigación se registra por primera vez la presencia de D. hyalinata y D. nitidalis sobre M. pendula L. en el estado Lara, Venezuela.
Entre los meses de enero y marzo de 2018 se observó la presencia de larvas de lepidópteros alimentándose de frutos y hojas del pepino de culebra en un cultivo de vid Criolla Negra, un cultivar nativo de Vitis vinifera x Vitis caribaea (Olmo, 1968), del Instituto de la Uva del Decanato de Agronomía de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA) (10º 01´09´´N, 69º17´18´´O), 500 m, Tarabana, municipio Palavecino, estado Lara, Venezuela.
Las muestras botánicas se tomaron empleando las técnicas tradicionales de herborización y se depositaron en el Herbario José Antonio Casadiego (UCOB), Decanato de Agronomía de la UCLA. Para las muestras entomológicas se recolectaron frutos y hojas del pepino de culebra. Este material se introdujo en envases plásticos de 0,5 L de capacidad, rotulados con una etiqueta que indicó el lugar, fecha, la planta hospedante y el nombre del recolector.
Los envases utilizados para la recolección fueron previamente preparados con una abertura en su tapa, cubierta por tela tipo tul, con el propósito de una adecuada ventilación. Una vez finalizada la recolecta, los envases plásticos fueron trasladados al laboratorio de investigación de Entomología del Decanato de Agronomía de la UCLA, ubicado en Tarabana, Estado Lara.
En el laboratorio, los frutos y hojas se colocaron en envases de vidrio de capacidad 3,875 L, tapados con tela tipo tul. Se colocaron en una sala de cría a 29± 1ºC, 70± 5% HR y 12:12 (D:N) horas de fotoperiodo. Los adultos obtenidos se montaron, etiquetaron y depositaron en el Museo de Entomología José Manuel Osorio (MJMO), Decanato de Agronomía de la UCLA.
Los lepidópteros se identificaron por comparación morfológica siguiendo los trabajos de Janzen y Hallwachs (2009), la clave del género Diaphania Hübner (Clavijo, Munroe y Arias, 1995; Arias y Clavijo, 2001).
El pepino de culebra fue identificado por comparación con fotografía, descripción y clave de la familia Cucurbitaceae (Hardy, 1976). Las fotografías fueron realizadas con una cámara fotográfica digital marca Canon PowerShot SD750®.
Del muestreo se obtuvieron un total de 10 ejemplares. Los lepidópteros encontrados fueron identificados como D. hyalinata y D. nitidalis (Figura 1A-B), mientras que la planta fue identificada como M. pendula (Figura 2). Este trabajo reporta por primera vez a D. hyalinata y D. nitidalis como especies asociadas a M. pendula en el estado Lara y se realiza un nuevo registro de D. nitidalis para el mismo estado lo cual constituye una fuente de información valiosa para ampliar el conocimiento de esta especie sobre la flora hospedante, de manera que con este nuevo aporte se puede asegurar con certeza la presencia de tres especies del género Diaphania considerando el registro previo de D. indica en un cultivo hidropónico de pepino en la misma localidad (Arcaya, Díaz y Paz, 2004). Además, se enriquecen los datos de distribución geográfica para Sudamérica al registrar por primera vez a la especie en la región centro occidental de Venezuela.
La semejanza morfológica entre las tres especies es bien reconocida y no siempre son claramente identificadas por lo que son citadas en la literatura como Diaphania spp. ocasionando un subregistro de las especies (Delgado et al., 1997; Hidalgo y González, 2007). De acuerdo con Clavijo (1990) las especies D. nitidalis, D. hyalina y D. indica son muy semejantes por lo que las clasifican en el grupo “hyalinata”. De la misma manera, el servicio de reconocimiento de plagas en puertos del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos de América (USDA) agrupa a D. hyalinata y D. indica como hyalinata-indica complex debido a la dificultad para diferenciar a sus larvas (Gilligan & Passoa, 2014). Un estudio de variabilidad isoenzimática con ejemplares de D. nitidalis, D. hyalinata y D. indica de tres localidades del estado Aragua, Venezuela, confirmó la relación de semejanza genética que existe entre D. hyalinata, D. nitidalis y D. indica, concluyéndose que el mayor grado de semejanza existe entre D. hyalinata y D. indica, siendo menor con D. nitidalis (Delgado, 2004).
Es importante considerar que además de M. pendula como hospedante natural de Diaphania se han reportado como planta hospedante a Amaranthus dubius Mart.ex.Thell y A. viridis L. (Lenin, 2011). Las especies A. dubius y A. viridis son también referidas como malezas en cultivos de guayaba (Pacheco et al., 2009) y M. pendula como maleza en bananos (Rodríguez y Agüero, 2000) aspecto que debe ser considerado en la evaluación de otros factores que favorezcan la aparición de insectos plagas. Una característica fisiológica de M. pendula de importancia a considerar para el control como maleza y hospedante de Diaphania es que posee estructuras subterráneas perennes que le permiten retoñar en función de la disponibilidad de agua (Lira y Casa, 1998).
Se conoce que el control biológico de plagas por manejo “push-pull” que se basa en el empleo combinados de plantas atractivas (push) y repelentes (pull) de insectos en los cultivos (Paredes, Campos y Cayuela, 2013), dado que esta tecnología ha sido estudiada en melón para evaluar las preferencias de estados inmaduros de D. nitidalis para su control utilizando calabaza como cultivo trampa y sandía como barrera repelente (Leiner y Spafforf , 2016), sería de gran interés agronómico evaluar la capacidad de M. pendula como cultivo trampa.
Con este registro de D. hyalinata y D. nitidalis se confirma la presencia de las tres especies de importancia agronómica del grupo “hyalinata” (Clavijo, 1990) en el municipio Palavecino del estado Lara. En el aspecto económico, por ser un estado productor de rubros como el pepino y melón, el reporte de esta relación entre las especies de Diaphania y M. pendula constituye un factor de importancia a considerar cuando se desarrollen programas de control y ejecuten adecuadas prácticas culturales en los cultivos de cucurbitáceas en el estado Lara.