INTRODUCCIÓN
En la última década, el desempeño económico del Paraguay resultó destacable, obteniendo una tasa de crecimiento promedio sustancial y experimentando considerables mejoras en diversos sectores socioeconómicos.
Sin embargo, ese crecimiento no ha beneficiado en la misma medida a todos los segmentos de la sociedad y el desafío de reducir la pobreza y la desigualdad permanece, sobre todo en las zonas rurales, donde estos problemas se encuentran más arraigados.
Si bien se puede observar que se han dado importantes progresos en zonas urbanas y rurales, el país aún enfrenta desafíos, especialmente en las zonas rurales, donde la desigualdad es considerablemente mayor.
Con alrededor del 40% de la población ubicada en la zona rural del país, hasta el día de hoy se puede comprobar que la mayoría de las privaciones monetarias y no monetarias se concentran en esta área.
En este contexto, es de vital importancia atender al sector agrícola, ya que la principal fuente de ingresos de las personas de este sector proviene de la agricultura y la mayoría de ellas lo hacen por cuenta propia, ya sea para consumo propio o para su comercialización en pequeños mercados.
De acuerdo con lo referido, es objetivo principal de este trabajo responder a la interrogante de en qué manera influye el crecimiento económico del Paraguay en la calidad de vida de las familias de la zona rural del país.
A través de la metodología de las Curvas de Incidencia del Crecimiento desarrollada por Ravallion-Chen, se analizan los efectos del crecimiento económico en la calidad de vida de las familias de la zona rural, utilizando el ingreso per cápita como indicador para realizar comparaciones, estableciendo el supuesto de que un aumento de los niveles de renta se traduciría en una mayor oportunidad de acceder a mejoras en cuanto a salud, nutrición y educación de la población.
Teniendo en cuenta los problemas estructurales históricos del Paraguay para mantener el crecimiento económico y a su vez mejorar los indicadores sociales, resulta indispensable explorar los factores asociados a esta situación.
MATERIALES Y MÉTODOS
El presente trabajo de investigación fue realizado, en principio, en base a un diseño documental-bibliográfico, con el fin de recopilar evidencia referente al crecimiento económico y su relación con el mejoramiento del bienestar de la población en fuentes secundarias.
Con este fin, fueron revisados informes y publicaciones realizados por organismos internacionales como el Banco Mundial y las Naciones Unidas; boletines proveídos por la Dirección General de Estadística, Encuestas y Censos (DGEEC), así como estudios e informes publicados por los distintos ministerios y organismos nacionales.
Inicialmente, la investigación fue realizada a un nivel exploratorio, con el fin de conocer más acerca del tema; para luego pasar, en una segunda instancia, a un nivel descriptivo, analizando el escenario económico en el cual se desempeñó el Paraguay entre los años 2005 y 2015, y el comportamiento de determinados indicadores sociales y económicos, específicamente de la zona rural del país en el mismo periodo.
El periodo de investigación señalado fue seleccionado principalmente teniendo en cuenta la disponibilidad de fuentes de datos necesarios para la realización del análisis.
Finalmente, se buscó alcanzar un nivel correlacional entre el crecimiento económico y los ingresos de las familias de la zona rural, con la intención de determinar si el comportamiento del ciclo económico tuvo algún efecto en la calidad de vida de dichas familias, medida por el cambio en sus ingresos.
Cabe destacar que a su vez fueron utilizados métodos inductivos con el fin de, a partir de fenómenos particulares observados, llegar a conclusiones aplicables a nivel más general. Fueron de especial utilidad los micro datos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), la base de datos INGREFAM que contiene información sobre los ingresos, de donde fue extraída la variable ipcm correspondiente al ingreso per cápita mensual, variable que permitió medir el impacto del crecimiento económico en el área rural. A su vez, fueron utilizadas las bases de datos R01 y R02 que contienen información acerca de las características de la vivienda y la población, respectivamente.
La metodología utilizada para contrastar la hipótesis planteada fue la desarrollada por Ravallion-Chen. El paquete estadístico STATA fue utilizado para el procesamiento de los datos y la elaboración de las curvas de incidencia de Ravallion-Chen, entre otros elementos útiles a la hora del procesamiento de la información obtenida.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
El desempeño económico del Paraguay ha mejorado de manera importante en los últimos años, siendo la tasa de crecimiento del producto interno bruto (PIB) superior al PIB de la mayoría de los países de la región (Arce & Arias, 2015).
Tal es así, que el crecimiento promedio del producto interno bruto entre 2005-2010 fue de 4,6%, siendo este ampliamente superior al promedio de los años anteriores, incluso a pesar de los efectos de la crisis económica mundial y factores climáticos, donde una fuerte sequía afectó severamente a la producción agropecuaria en el año 2009 (Figura 1).
Fuente: Elaboración propia con datos extraídos del Banco Central del Paraguay (BCP).
En lo que respecta al período comprendido entre los años 2011-2015, el producto interno bruto presentó una tasa de crecimiento promedio del 5%.
Destacan en este periodo, una nueva caída en el año 2012, explicada por condiciones climáticas y fitosanitarias adversas que afectaron a la agricultura y la ganadería y, por otro lado, una recuperación en el año 2013 con un crecimiento del 14% impulsado por la producción agrícola y las exportaciones (BCP, 2017).
Dicho esto, se puede notar que Paraguay presentó un marcado aceleramiento del crecimiento económico en los últimos años, explicado especialmente por el buen desempeño del sector agrícola y el de otros sectores como la ganadería, la manufactura y la construcción. Sin embargo, el crecimiento ha sido muy volátil considerando la dependencia de factores exógenos como el clima y los precios internacionales, teniendo esta volatilidad efectos negativos sobre el bienestar y la equidad. Esto podría afectar la capacidad de crecimiento económico de largo plazo y, por consiguiente, podrían aumentar aún más las dificultades para reducir la pobreza y la desigualdad (Loayza et al. 2007; Castilleja, Garay & Lovera, 2014).
Teniendo en cuenta que los ingresos de las personas ubicadas en las zonas rurales dependen desproporcionadamente de la agricultura para la obtención de sus ingresos, se encuentran expuestos directamente a las fluctuaciones de precios y riesgos climáticos.
Es por esto que resulta preocupante el hecho de que, si bien el crecimiento económico de la última década estuvo acompañado de una disminución sustantiva de la pobreza, las dos terceras partes de los pobres extremos siguen viviendo en zonas rurales (DGEEC, 2016, Salinas, 2016).
Manifestaciones de la desigualdad social existente según dominio geográfico
Hoy en día, el elevado y persistente nivel de desigualdad de oportunidades entre los distintos grupos poblacionales, definidos de acuerdo a las circunstancias del nacimiento, constituye uno de los mayores obstáculos estructurales en el camino de la búsqueda de una sociedad equitativa. Con alrededor del 40% de la población ubicada en la zona rural del país, hasta el día de hoy se puede comprobar que la mayoría de las privaciones monetarias y no monetarias se concentran en esta área (DGEEC, 2016).
El ingreso per cápita como medida de bienestar
El ingreso per cápita es una variable aproximada bastante buena en la mayoría de los casos para realizar comparaciones, ya que es posible afirmar que un aumento de los niveles de renta se traduce, necesariamente, en una mejora de los niveles de salud, nutrición y educación de la población.
Teniendo en cuenta la definición de equidad asumida por el Banco Mundial, siendo la primera dimensión del triángulo de la equidad la eliminación de la pobreza absoluta, superar las diferencias existentes según el dominio geográfico supone un desafío a la hora de garantizar un estándar de vida mínimo todos los miembros de una sociedad para que puedan vivir con dignidad (López et al., 2015, Ray, 1998).
Las Curvas de Incidencia del Crecimiento de Ravallion y Chen
La metodología utilizada es la propuesta por Ravallion y Chen (2003), denominada Curvas de Incidencia del Crecimiento (CIC), y constituye un instrumento simple para estudiar la distribución del crecimiento y evaluar la medida en que los diferentes segmentos de la población participan en el proceso de crecimiento.
Estas curvas muestran las tasas de crecimiento de los ingresos de cada percentil de la distribución, y a su vez, la ubicación de los gráficos es informativa acerca de la distribución del crecimiento.
La posición de la Curva de Incidencia del Crecimiento sobre o debajo del eje horizontal indica que todos los estratos experimentaron incrementos o caídas en el ingreso per cápita.
La pendiente de la Curva de Incidencia del Crecimiento muestra el sesgo distributivo; curvas decrecientes implican tasas de crecimiento más elevadas en los estratos más pobres, y por lo tanto caídas de la desigualdad. Idealmente, la Curva de Incidencia del Crecimiento de un país debería estar situada sustancialmente por arriba del eje horizontal y ser decreciente, dando lugar a un crecimiento igualador.
Este modelo resulta de gran utilidad teniendo en cuenta su capacidad de evaluar una economía no solo en términos del crecimiento del ingreso medio o per cápita, sino también en términos de la distribución de ese crecimiento y, en particular, a través de los cambios del ingreso de la población ubicada en los percentiles de ingresos más bajos.
Esto captura el concepto de prosperidad compartida más que otras medidas de bienestar, como el crecimiento del PIB per cápita, ya que toma en cuenta cuánto se benefician los más pobres del crecimiento económico.
Fórmulas y metodología utilizada
Para la elaboración de las Curvas de Incidencia del Crecimiento del periodo de análisis fueron estimadas las tasas de crecimiento de cada percentil mediante la ecuación 1.
Donde g(t) es la tasa de crecimiento del percentil (p), la variable yt(p) el ingreso del percentil (p) en el periodo t, mientras que yt-1(p) es el ingreso del percentil (p) en el periodo t-1. Al variar (p) de cero a uno, el trazado que se genera es la curva de incidencia del crecimiento.
Resultados del modelo aplicado a la Zona Rural del Paraguay
Aplicando la metodología de Ravallion y Chen, se procedió a graficar la Curva de Incidencia del Crecimiento para la Zona Rural del Paraguay para los siguientes periodos: 2005-2015, 2005- 2010, 2011-2015, 2009-2010, y 2012-2013.
Se consideró conveniente separar los procesos según la dinámica observada en el crecimiento económico en ese periodo.
Es por eso que se diferencia entre los periodos correspondientes a situaciones de acentuada expansión, los cuales comprenden a los periodos del 2009-2010 y 2012-2013.
Curva de Incidencia del Crecimiento - Periodo 2005-2015
La Curva de Incidencia del Crecimiento trazada para el periodo completo de análisis de esta investigación se refleja en la Figura 2.
Fuente: Elaboración propia con datos extraídos de la EPH.
Teniendo en cuenta un promedio de crecimiento del PIB de 4,79%, se puede afirmar que este proceso estuvo acompañado de un crecimiento en el ingreso per cápita de todos los percentiles de ingreso.
Se nota a su vez una tendencia decreciente en la curva, lo que sugiere que además el crecimiento afectó de manera positiva a los ingresos de los percentiles de menor riqueza.
Al observar más detenidamente la tabla de la figura 2, se puede notar que efectivamente la tasa de crecimiento de los ingresos fue mayor en los percentiles de ingreso más bajos.
Esto nos permite afirmar que, además de que el crecimiento económico estuvo acompañado por un crecimiento del ingreso per cápita, fue un crecimiento igualador, beneficiando en mayor medida al segmento de la población con ingresos más bajos.
Siguiendo el comportamiento económico a lo largo del periodo analizado, se consideró conveniente a su vez separar en dos el periodo analizado.
El primer periodo, del 2005-2010, estuvo caracterizado por un crecimiento económico sostenido hasta el año 2008, luego por la recesión en el año 2009 y un crecimiento del 13% en el año 2010.
A su vez, se pudieron observar mejoras en la distribución de los ingresos, situación que posiblemente resultó amortiguada por la suba de los precios de los alimentos, afectando sobre todo a la población más vulnerable.
Así, se puede observar que, para este periodo, si bien el crecimiento promedio de la economía fue de 4,63%, la variación del ingreso en casi todos los percentiles muestra una tasa de variación negativa. También, se puede notar que esta situación resultó tener mayor impacto en aquellas personas ubicadas en los percentiles más bajos (Figura 3a).
Fuente: Elaboración propia con datos extraídos de la EPH
Sin embargo, para el periodo 2011-2015 (Figura 3b), si bien la tasa de crecimiento promedio de la economía no resulta muy diferente a la del periodo 2005-2010, con un 4,96%, se pueden notar diferencias sustanciales entre ambas curvas de incidencia del crecimiento.
A diferencia de la CIC del periodo 2005-2010, se muestra una marcada tendencia decreciente, sugiriendo que, en este periodo, las personas ubicadas en los percentiles de menor ingreso fueron las más beneficiadas por el crecimiento económico.
Curva de Incidencia del Crecimiento - Periodos expansivos
En cuanto a los periodos expansivos observados dentro del periodo analizado, destacan los del año 2010 y 2013, con tasas de crecimiento de la economía de 13% y 14% respectivamente.
Para el periodo 2009-2010 (Figura 4a) se pudo notar que, si bien la mayor parte de la población obtuvo tasas positivas de crecimiento del ingreso, las personas ubicadas en los percentiles más bajos obtuvieron tasas decrecientes del ingreso.
En lo que respecta al periodo del 2012-2013 (Figura 4b), se puede observar que los más beneficiados por el crecimiento económico del periodo fueron aquellos ubicados en los percentiles más bajos de ingreso y se nota a la vez una tasa decreciente a partir del percentil 75.
Si bien la diferencia en lo referente a tasas de crecimiento económico del país no fue sustancial, se pueden observar dinámicas casi opuestas en ambas curvas, explicada por la diferencia en cuanto al escenario macroeconómico enfrentado en los diferentes periodos.
Fuente: Elaboración propia con datos extraídos de la EPH
Referente a esta diferencia, uno de los factores a destacar sería la sustancial ampliación de la cobertura de los distintos programas de lucha contra la pobreza, como ser Tekopora, Pensión para Adultos Mayores entre otros.
Así también, el nivel de precios de los alimentos y la variación del precio de los commodities serían otros factores a tener en cuenta.
Medidas de bienestar no remunerativas
Teniendo en cuenta que el ingreso se encuentra distribuido de manera desigual dentro de todos los países, y aún más en los países en vías de desarrollo, se puede afirmar que el uso del PIB per cápita como indicador absoluto del bienestar puede inducir a errores.
Por esta razón, resulta importante analizar también medidas de bienestar diferentes al ingreso por hogar, para poder evaluar la problemática desde otra perspectiva.
A este efecto, se usan de referencia ciertas variables que componen las distintas categorías del Índice de Calidad de Vida (ICV), entre las cuales se destacan el porcentaje de personas con seguro de un servicio de salud, el número de años de educación formal de los miembros del hogar, una fuente principal de agua, el acceso a electricidad, entre otras (Díaz-Bonilla, 2010).
Salud
Tanto a nivel urbano como rural se puede notar una baja cobertura del seguro médico, que en este caso incluye tanto el seguro médico ofrecido por el Instituto de Previsión Social, como la cobertura de seguro médico del sector privado.
La cobertura del seguro médico es baja para la población en general, pero se puede notar que es mucho menor para la población ubicada en la zona rural, sin siquiera alcanzar la mitad del porcentaje de cobertura correspondiente a la zona urbana (Figura 5).
No obstante, se puede observar un leve aumento de la cobertura entre los años 2005 y 2015, tanto para la zona urbana como para la zona rural.
Fuente: Elaboración propia con datos extraídos de la EPH (2005-2010-2015)
Educación
Los bajos niveles de escolaridad son notoriamente acentuados en la zona rural, teniendo en cuenta que, para el año 2015, solo el 7,3% de los jefes de hogar tuvo la oportunidad de acceder a una educación del nivel terciario (Figura 6).
Si bien, son tasas muy pequeñas de acceso a la educación superior, es importante destacar la tendencia ascendente del acceso a niveles más elevados de educación, así como se puede observar una tendencia descendente en el porcentaje de Jefes de Hogares sin instrucción o que solo tuvo la posibilidad de completar la Educación Escolar Básica.
Fuente: Elaboración propia con datos extraídos de la EPH (2005-2010-2015)
Servicios Básicos
Teniendo en cuenta la cobertura del servicio entre los años 2005 y 2015 cabe destacar la ampliación significativa del servicio público a través de la Empresa Sanitaria de Servicios del Paraguay (ESSAP) y del Servicio Nacional de Saneamiento Ambiental (SENASA) en la zona rural que, de un 25,2% de cobertura del servicio público en el año 2005, pasó a un 38,9% para el año 2010 y a un 49,6% para el año 2015 (Figura 7).
Fuente: Elaboración propia con datos extraídos de la EPH (2005-2010-2015)
CONCLUSIONES
El Paraguay se ha destacado en la última década por el dinamismo reflejado en su economía, adjudicándose tasas de crecimiento económico de entre 4% y 5% en promedio, pero aún enfrenta ciertos desafíos que amenazan la sostenibilidad de estas mejoras.
Uno de los principales obstáculos hace referencia a que gran parte de la población se enfrenta a un entorno económico con un alto componente de volatilidad. Esto afecta de manera especial a la población de la zona rural, teniendo en cuenta la alta dependenciadel sector agrícola como fuente principal de sus ingresos.
De esta manera, la mayor vulnerabilidad de la población ubicada en la zona rural del país motivó a la realización del análisis de los efectos del crecimiento económico en el ingreso per cápita de la población ubicada en esta región, utilizándolo como un indicador adecuado a la hora de medir las mejoras en el bienestar de la población.
Los resultados obtenidos del análisis realizado a través de la metodología propuesta por Ravallion y Chen sugieren que los periodos de crecimiento económico estuvieron acompañados por una mejora en el ingreso per cápita de las personas de la zona rural, notándose a su vez una tendencia decreciente en la curva, lo que sugiere un crecimiento igualador, teniendo en cuenta que para el periodo estudiado se obtuvo un crecimiento promedio del PIB de 4,79%, traduciéndose en un crecimiento del 3,5% para el decil más bajo y de 1,28% para el decil más alto.
Es así que, si bien el crecimiento económico constituye un factor necesario para avanzar hacia un estado de bienestar y de prosperidad compartida a nivel general, diversos factores llevan a que los indicadores sociales no respondan de manera dinámica a esta situación.
Dicho esto, se concluye que, el crecimiento económico tuvo efectos positivos en el ingreso de la población ubicada en el sector rural del país, comprobándose que el crecimiento económico influye de manera positiva en la calidad de vida de las familias de la zona rural del Paraguay, pero a su vez el análisis interanual permite apreciar que resulta imprescindible prestar especial atención a otros factores que afectan a este sector, y que a su vez frenan la posibilidad de los habitantes del país de acceder de manera equitativa a los beneficios del crecimiento.
Factores como la pobreza arraigada en las zonas más vulnerables del país y la marcada desigualdad en la distribución de los ingresos en los diferentes segmentos de la población, son temas por abordar de manera más extensa, con el fin de determinar las mejoras necesarias para lograr la sostenibilidad del modelo económico y social del país.