El parto por cesárea produce una falla en la reconstitución del endometrio- miometrio en un siguiente embarazo asociándose a mayor riesgo de complicaciones…, incrementando la morbilidad y mortalidad por hemorragia1.
Los factores de riesgos principales para el desarrollo de anomalías de inserciones placentarias como cesáreas anteriores y la placenta previa están en aumento.
La Organización Mundial de la Salud recomienda que los alumbramientos por cesáreas no excedan el 15 %. En Paraguay la proporción de partos por cesáreas asciende a más del 40 %2,3.
Paciente de 34 años, gestante de 34 semanas. Doble cesáreada anterior con estudio ecográfico previo (Fig.1) con informe de signos indirectos de ascetismo placentario, sin estudio de Resonancia Magnética Nuclear.
Previo al acto quirúrgico se realizó colocación de Traje Anti shock no neumático (TANN) y control de signos vitales por Escala de alerta precoz obstétrica (EAPO)4.
Se visualiza segmento uterino inferior con hipervascularización irregular, tumoración de 8 cm, coloración violácea, contenida por peritoneo visceral del útero que podría corresponder a percretismo placentario (Fig.2).
Se realizó Operación Cesárea abdominal corporal, se dio nacimiento a recién nacido vivo.
Se realizó instilación de 2 ampollas de 2 ml. de polidocanol al 3 % con sonda K33 en cordón umbilical para disminución del riesgo de sangrado, ligadura del mismo, introducción de cordón en cavidad uterina y cierre de Histerorrafia + Histerectomía subtotal (Fig. 3).
CONCLUSIÓN
Las anomalías de inserción placentarias tienden a ser más frecuentes, avanzando de la mano con los casos de aumento de cesáreas actuales en los centros Hospitalarios.
El diagnóstico oportuno por medio de estudios de imagen, actuación médica criteriosa y el seguimiento de los protocolos establecidos nos llevara a la excelencia en la resolución de dichos casos.