CASO CLINICO
Paciente de sexo masculino, de 40 años edad, ingresa con antecedente de accidente en motocicleta y traumatismo de hombro izquierdo, quedando con dolor en región escapular derecha y signos de isquemia en la extremidad superior (parestesia, palidez, dolor, ausencia de pulsos y parálisis) (Figura 1). La arteriografía de urgencia confirmó la lesión: embolia de la arteria axilar izquierda (Figura 2). El diagnóstico fue de isquemia aguda postraumática de la extremidad superior izquierda por lesión de la arteria axilar (Grado 2B), junto a fractura del cuerpo de la escápula izquierda.

Figura 1 Paciente posterior a la revascularización de urgencia. A. Vista de frente. B. Vista posterior.

Figura 2 A. Radiografía simple de tórax, anteroposterior. Fractura de la escápula (flechas finas). B. Arteriografía del miembro superior. Lesión de la arteria axilar (flecha gruesa). Se realizó revascularización quirúrgica abierta con catéter de Fogarty. La fractura de escápula fue tratada de manera conservadora. El paciente evolucionó con lesión del plexo braquial C5-C6-C7
DISCUSION
Las lesiones vasculares postraumáticas que se asocian a fracturas y luxaciones de húmero proximal son muy raras y con asociación a fracturas de la escápula son mucho menos frecuentes. La presentación en las luxaciones glenohumerales es inferior al 1% y en las fracturas de cuello de húmero es de menor porcentaje1,2. Por las complicaciones que pueden provocar, requieren de un rápido diagnóstico y un tratamiento adecuado, para evitar daños permanentes. Así mismo, las fracturas de la escápula son raras, representan menos del 1% de todas las fracturas y el 3-5% de las fracturas de la región del hombro 3,4.
En el caso presentado, la lesión de la arteria axilar se produjo a causa del traumatismo directo y no a consecuencia de la fractura de la escápula.
El trabajo multidisciplinario entre el traumatólogo y el cirujano vascular resulta fundamental.