INTRODUCCIÓN

La cavidad bucal ofrece el portal perfecto de entrada a virus y bacterias del medio ambiente, por lo tanto, es uno de los hábitats más densamente poblados del cuerpo humano, se hospedan en él una gran cantidad de microorganismos, como los Bacilos Gram Negativos, de gran importancia médica debido a su capacidad de producir enfermedades graves para el ser humano, especialmente en pacientes inmunodeprimidos^1-3.

La familia Enterobacteriaceae, cuyo hábitat natural es el intestino del ser humano, es un grupo heterogéneo y extenso de Bacilos Gram Negativos, entre los cuales encontramos a: Escherichia, Shigella, Salmonella, Enterobacter, Klebsiella, Serratia, Proteus entre otros. Algunos microorganismos entéricos como Escherichia coli son parte de la microbiota normal y en contadas ocasiones originan enfermedades, en cambio existen otras cepas que producen enfermedades que llevan a la muerte de los pacientes^4-6.

Existe un incremento de la resistencia a antibióticos por parte de estos microorganismos en todo el mundo, y en Paraguay, existen diversos estudios de muestras hospitalarias que reportan la existencia de cepas de Enterobacterias productoras de Betalactamasas de Espectro Extendido (BLEE), condición que podría ser grave debido a la complejidad de tratamiento que estas cepas de microorganismos requieren^7-11.

Una bacteria es sensible a un antibiótico cuando el antibiótico es eficiente frente a ella y podemos aguardar la remisión de la infección, por otra parte, es resistente cuando su crecimiento solo puede ser impedido a concentraciones mayores a las que el fármaco pueda llegar en la zona de la infección. Se relacionan a una mayor morbilidad y mortalidad las infecciones provocadas por bacterias multi resistentes^12-15.

Se ha visto que los bacilos entéricos codifican en su genoma genes de resistencia a antibióticos de uso común como los Betalactámicos, grupo de antibióticos mayormente usado en la práctica odontológica, lo cual ocasiona problemas en el tratamiento de las infecciones; ya que pueden llegar a generar resistencia a los antibióticos como la amoxicilina o a terapias alternas como lo son la doxiciclina y ciprofloxacina^12-20.

El objetivo de este trabajo fue determinar la presencia de Bacilos Gram Negativos y sus patrones de resistencia a antibióticos, en una población estudiantil de la ciudad de Asunción, en los años 2019 y 2020.

MATERIALES Y MÉTODOS

Se realizó un estudio observacional, descriptivo, de corte transversal, en donde se realizaron hisopados de la cavidad bucal a 35 alumnos de una Universidad de Asunción, de ambos sexos, de entre 18 a 24 años de edad. Para participar del trabajo se requirió de un consentimiento informado firmado por los participantes, donde se presentó los pormenores del estudio. Las variables estudiadas fueron presencia de Bacilos Gram Negativos en cavidad oral, frecuencia de las distintas especias aisladas, y la susceptibilidad a distintos antibióticos por parte de estas. Se excluyeron del estudio a quienes tuvieron tratamientos antibióticos recientes, tanto locales como sistémicos.

Las muestras fueron obtenidas mediante un hisopado de la cavidad bucal, abarcando lengua, encía y fondo de surco vestibular, realizado con un hisopo de algodón estéril, se colocaron en un medio de transporte (Stuart) para luego ser cultivadas en Agar MacConkey, específico para el crecimiento de los Bacilos Gram Negativos. El cultivo se realizó por 48 horas en estufa a 37° centígrados, luego se procedió a la identificación por género y especie de los microorganismos a través de pruebas bioquímicas en el laboratorio. Por último, se realizó el antibiograma de las muestras positivas con el método de difusión de disco, para reconocer los patrones de sensibilidad y resistencia a antibióticos.

Todos los datos fueron manejados de manera confidencial y asentados en planillas Excel para su posterior análisis con la herramienta Epi Info™ 7. Se respetaron los principios éticos durante todo el trabajo.

RESULTADOS

Del total de 35 alumnos, se halló la presencia de 17 (48,57%) muestras positivas para Bacilos Gram negativos de los cuales, se pudo observar que las especies de Klebsiella pneumoniae fueron las que se encontraron con mayor frecuencia (35,29%), seguido por Pseudomonas aeruginosa (29,41%). (ver Gráfico 1).

Gráfico 1: Frecuencia de bacilos Gram negativos aislados. n:17. 

En el antibiograma se observó que las bacterias eran altamente resistentes a la Amoxicilina/Ácido Clavulánico, el cual es uno de los antibióticos más utilizados en la odontología. Un porcentaje importante también resultó resistente a la Ceftazidima y los fármacos con mejores resultados de sensibilidad in vitro fueron la Gentamicina y la Ciprofloxacina. Otros fármacos testados fueron la Cefotaxima, Trimetroprima-Sulfametoxazol, Imipenen, Piperacilina-Tazobactam, obteniéndose distintos resultados (Ver Tabla 1)

Figura 1: Placas con crecimientos de bacilos Gram Negativos  

DISCUSIÓN

En el presente trabajo se halló́ una frecuencia de 48,57% de bacilos Gram Negativos, en otro estudio, también en nuestro país, se encontró una mayor proporción de estos microrganismos, un total de 65% estuvo presente en provisorios dentales de polimetilmetacrilato (PMM)⁷. En el trabajo de Harold y colaboradores se encontró una cifra inferior, que fue de 30% en la microbiota de la cavidad bucal de personas que viven a 3824 metros sobre el nivel del mar²¹. Khushbu y col. encontró una frecuencia de 8.48% en pacientes con dientes cariados de la Facultad de Medicina de Janaki, hospital universitario en Nepal²². Betancourth y Cols., encontraron una proporción de 36% de bacilos Gram negativos entéricos en la microbiota inusual de los pacientes incluidos en su trabajo, que trata sobre la microbiota inusual del surco gingival y bolsas periodontales^6).

En nuestra investigación, las especies de K. pneumoniae fueron las que se encontraron con mayor frecuencia 35,29%, coincidiendo con los trabajos realizados por Betancourth, quien los aisló de la cavidad bucal en general⁶, el trabajo de Coronado et al. en el que presentaron una frecuencia del 35% de dicho microorganismo en provisorios de resina acrílica²³; el trabajo de Khushbu y col. con 32.14% en dientes cariados²²,y un trabajo realizado en Paraguay en el que presentaron una frecuencia de 40% en provisorios de polimetilmetacrilato⁷. En otra investigación de Leguizamón sobre aislamientos de bacilos entéricos provenientes de cavidad oral, fue el segundo bacilo Gram negativo encontrado con mayor frecuencia, con un 16%²⁴.

Otro bacilo Gram Negativo aislado en un número interesante fue Pseudomonas aeruginosa con un 29,41%, similar a lo encontrado por Khushbu y col. con un 39.28%, en dientes cariados²². En un trabajo realizado por Consuegra et. al. en implantes dentales afectados, se encontró una frecuencia menor, que fue de 1,5% (25) y en el estudio de Coronado et al se encontró una frecuencia de 17% en provisorios de resina acrílica²³.

La bacteria que se presentó en menor frecuencia fue Enterobacter cloacae en un 11,76%, similar a lo aislado por Khushbu y col. con 10,71% en dientes con caries (22). Este porcentaje es menor a los aislados en provisorios de PMM, que fue de 25% (7) y mayor a lo encontrado por Coronado et al. que halló 6% en provisorios de resina acrílica (23). Por otro lado, en el trabajo de Leguizamón fue la bacteria encontrada con mayor frecuencia, con un 30% (24). En el estudio de Revelo Mejía y cols se aislaron bacilos Gram negativos en cepillos dentales en el 87,9% de los casos, y de estos el 37,2 % correspondían a Enterobacter cloacae²⁶.

Esta variación encontrada en los diversos reportes, sobre la frecuencia de estos microorganismos podría ocurrir por diversos factores, como por ejemplo la alimentación, la higiene bucal y de las manos, la calidad del agua consumida, el comportamiento y la cultura, de cada una de las regiones y países donde las poblaciones fueron estudiadas⁷.

En cuanto al antibiograma realizado a los cultivos positivos, se observó que las bacterias eran altamente resistentes a la Amoxicilina/Ácido Clavulánico, con 54,54% de muestras resistentes, similar a lo reportado por Pérez con una resistencia de 50% a la Amoxicilina por parte de E. coli y Klebsiella¹⁴ el cual es uno de los antibióticos más utilizados en la odontología. También lo reportado por Jaramillo en un estudio en bacterias periodontopáticas aisladas de pacientes colombianos sanos y con periodontitis, frente a 6 antimicrobianos usados comúnmente como terapia adjunta para el tratamiento de la enfermedad periodontal, con una resistencia del 87% por parte del Enterobacter cloacae y 100% por parte de Klebsiella pneumoniae²⁷.

Las bacterias estudiadas también resultaron resistentes a la Ceftazidima como en el trabajo de López y cols en el cual se realizó una revisión de la literatura sobre la resistencia de estos microorganismos a dicho fármaco (20). Los antibióticos con mayor sensibilidad in vitro fueron la Gentamicina y la Ciprofloxacina concordando con el trabajo de Guerra y cols con un 100% y 94,5% de sensibilidad respectivamente¹⁶ y también con el trabajo de Leguizamón de bacterias obtenidas de la cavidad bucal, con un 90%^24).

También en el presente trabajo se encontró una sensibilidad in vitro del 71,42% al Imipenen, coincidiendo nuevamente con el trabajo de Bravo y cols que reportaron un 93,2%¹⁶.

CONCLUSIÓN

En el presente estudio se halló una frecuencia elevada de Bacilos Gram Negativos en la cavidad bucal de la población estudiada (48,57%). La frecuencia encontrada coincide con otros hallazgos similares en otros países de la región. Entre los patrones de resistencia encontrados, se observó que algunas cepas eran multirresistentes a los antibióticos más utilizados en odontología.

La presencia de estos tipos de microorganismos puede ser peligrosa para la salud general de las personas, específicamente de los pacientes con algún tipo de inmunodepresión, debido a la gran la resistencia a antibióticos presentadas por algunas cepas. La cavidad bucal es un reservorio importante para estos tipos de microorganismos, y la presencia de microorganismos potencialmente infectantes debe ser tomada con precaución debido a la constante mutación y adquisición de factores de resistencia a antibióticos.

Se recomienda continuar con estas líneas de investigación aumentando la cantidad de muestras y estableciendo correlaciones con otras patologías presentes en los pacientes.