INTRODUCCION
La diabetes mellitus (DM) es une enfermedad crónica inflamatoria muy frecuente y por ende una de las emergencias sanitarias mundiales de más rápido crecimiento en las últimas décadas. Según datos recientes de la FID para el año 2021, la prevalencia global de DM en adultos entre los 20 y 79 años fue 537 millones (10.5% de la población) y se prevé que esta cifra alcance los 643 millones para el año 2030 1. Se estima que aproximadamente el 30% al 50% de los adultos con Diabetes Mellitus tipo 2 (DMT2) tienen compromiso renal desde el momento del diagnóstico, siendo esto, un marcador de pronóstico y calidad de vida 2.
Hemos visto, como han venido cambiando muchos tópicos relacionados con esta patología. Hoy en día, tenemos una definición más clara y unificada, un mejor entendimiento de la historia natural y fisiopatología del compromiso renal en el paciente diabético, en donde están involucrados varios ejes (hemodinámico, metabólico e inflamatorio), en los cuales hay múltiples vías que se interconectan y que explica la heterogeneidad del paciente diabético con compromiso renal 3. Resaltamos la importancia del componente inflamatorio como actor protagónico en el desarrollo de la Enfermedad renal diabética (ERD) 3,4. También, estamos avanzado en marcadores de diagnóstico más tempranos y que nos den más especificidad y poder así, intervenir de manera más rápida y hacer gestión del riesgo cardiovascular, para de esta manera trazar objetivos y metas en el manejo. Han sido varios cambios y avances que se han venido dando en la ERD 4.
Todo lo anterior, se traduce en los grandes avances en las intervenciones farmacológicas para el paciente con ERD. Estos medicamentos cumplen todos los requisitos para ser considerados terapias innovadoras y por eso el presente y futuro de en la ERD es muy esperanzador.
TRATAMIENTO DE LA ERD
El tratamiento de los pacientes con ERD debe ser integral y bajo una visión holística de su enfermedad, debe tener metas y objetivos claros y un abordaje centrado en el paciente 5.
Hasta hace muy pocos años solo existían dos grandes pilares o intervenciones exitosas en el paciente con ERD, de las cuales una de ellas es la base en el manejo y tiene que ver con cambios en el estilo de vida, evitar sedentarismo, hacer ejercicio, dejar de fumar, bajar de peso y control de factores de riesgo como lípidos, hiperglucemia y control del ácido úrico, entre otros 2,5. Hace aproximadamente 20 años llegaron y se posicionaron los Inh ECAS / ARA II como medicamentos nefroprotectores y se convirtieron en la primera intervención farmacológica nefroprotectora para nuestros pacientes con ERD. Ambas medidas siguen estando vigentes y posicionadas en todas las guías y protocolos de manejo de los pacientes con ERD 5.
NUEVOS PILARES EN EL TRATAMIENTO DE LA ERD
Recientemente vienen apareciendo otras intervenciones innovadoras, unas ya altamente posicionadas, como son los iSGLT-2, considerados hoy en día no solo medicamentos antidiabéticos, sino también medicamentos modificadores de la enfermedad, con evidencia científica consolidada tanto en etapas tempranas como en etapas más tardías de la ERD y más aún, con evidencia, algunos de ellos, en otras patologías asociadas como la ERC no diabética y la falla cardiaca 5,6.
Hoy en día, todo el gremio científico, habla de esta nueva clase de medicamentos, habla de sus grandes beneficios y por eso debemos estar muy familiarizados con su buen uso. Otras terapias, como algunos agonistas GLP-1 también han demostrado efecto cardio protector en los pacientes diabéticos y beneficios renales importantes, sin embargo, debemos esperar que su evidencia en resultados renales se consolide aún más. Los agonistas GLP-1 son medicamentos importantes en el manejo de la diabetes y de la ERD 5.
Por último, resaltar un grupo de medicamentos que actúan bloqueando el receptor mineralocorticoide (MRA). Estos medicamentos no son antidiabéticos. Dentro de este grupo de medicamentos, resaltar a finerenona, el cual tiene propiedades farmacocinéticas y farmacodinámicas que lo hacen algo diferente y que con sus estudios viene demostrando su papel nefro y cardioprotector en pacientes con ERD albuminúrica 7.
Pues bien, hace pocos años, contábamos con pocas herramientas de intervención, hoy en día eso cambio. Tenemos varios pilares en el manejo de la ERD y lo mejor es que se irán consolidando más estrategias no solo en la ERD sino también en la ER no diabética.
¿Y cuáles son los puntos importantes?... Estamos entendiendo que la ERD es sistémica e inflamatoria, que va mucho más allá de tener hiperglucemia, que la inflamación que se da por varias vías, que el eje cardio-renal es importante, ya que nuestros pacientes se mueren de enfermedad cardiovascular y por eso debemos gestionarlo e intervenirlo, que debemos actuar de manera temprana, impactando a varios niveles y que se vienen muchas más cosas buenas, todo esto con una gran meta, que es mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes diabéticos con compromiso renal.
Por último, recordemos por donde comenzamos, no olvidemos esos dos grandes pilares, las intervenciones no farmacológicas que impactan en el control de los factores de riesgo de progresión y los IECAS / ARAII.
CONCLUSION
Hay nuevos pilares en el tratamiento de la ERD. Los inhibidores SGLT-2, los Agonistas del receptor GLP-1 y el uso de ARM como finerenona, que nos brindan beneficios cardio-renales y que hacen que hoy en día el tratamiento de la ERD tenga un mejor panorama.
Contribución de los autores:
Jorge Rico Fontalvo y Lourdes Carolina Vázquez Jiménez: búsqueda literatura y escritura del artículo.
Conflicto de intereses: Los autores para este artículo no reportan conflicto de interés.
Fuente de Financiación: Los autores reportan que la financiación para este artículo fue con recursos propios.