INTRODUCCION
Infecciones por Micobacterias Atípicas son descritas con mucha frecuencia en varios países del mundo. Estas infecciones pueden estar relacionadas al sistema respiratorio en pacientes cuya capacidad de inmunocompetencia se encuentra normal o en ocasiones comprometida 1-3. También pueden causar infecciones sistémicas como en los casos de uso de catéteres o dispositivos intravasculares contaminados 4,5. También se producen infecciones en tejidos blandos como consecuencia de procedimientos quirúrgicos. Se han publicado infecciones en heridas producidas por acupuntura 6, lipoaspiración 7, implante de prótesis 8 y varios otros procedimientos mínimamente invasivos entre los que se encuentra las cirugías laparoscópicas 9. El común denominador en estas situaciones infecciosas es la realización de procedimientos invasivos y con ello la inoculación de gérmenes.
Dentro del género Mycobacteria existen varias especies, la más conocida es M. Tuberculosis que causa la Tuberculosis. Existen otras bacterias que pueden causar enfermedad en los humanos pero no causan tuberculosis (MNT), más conocidas como Mycobacterias Atípicas (MA). Las MA generalmente se encuentran habitando suelos, aguas contaminadas y ambientes hospitalarios como los quirófanos.
Estas Mycobacterias Atípicas se clasifican por los conocidos criterios de Runyon en 4 grupos según sus características de crecimiento en discos de agar: Fotocromógenos (FC) que producen un pigmento amarillo luego de ser expuestos a la luz; Escotocromógenos (EC) producen pigmentos sin ser expuestos a la luz; No-cromógenos (NC) no producen pigmentos y de Crecimiento Rápido (RG) caracterizadas por un crecimiento visible en agar estándar obtenido ya después de 1 semana a diferencia de otras MA que demoran más de 2 semanas. En este último grupo se encuentran el M. Fortuitum, M. Chelonae y M. Abscessus. Hasta no hace mucho tiempo atrás la especie M. Chelonae Complex comprendía otras subespecies, Chelonae y Abscessus pero actualmente con las nuevas técnicas de identificación se vio que en realidad son diferentes. Las técnicas para identificar a las MA difieren de las técnicas para gérmenes comunes y por lo tanto deben ser perfectamente definidas en la solicitud misma enviada al laboratorio. Al microscopio y con la tinción de Ziehl Neelsen se observan como Bacilos Acido Alcohol Resistentes (BAAR). Sin embargo la sola identificación microscópica no es suficiente pues no permite identificar las especies y posee baja sensibilidad además de requerir una vasta experiencia del microbiólogo en la observación de extendidos.
Técnicas más modernas como la Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR) asociadas al Análisis del Patrón Enzimático (PRA) son muy utilizadas para la identificación de las diferentes especies 10. En este manuscrito se hará énfasis en las MA de crecimiento rápido (MRG). Estas Mycobacterias pueden afectar a pacientes Incuncomprometidsos por ejemplo VIH o consumo crónico de corticoides y causar infecciones sistémicas. En pacientes sin compromiso inmunológico rara vez causan afecciones sistémicas y usualmente causan afecciones en tejidos en tejidos blandos posterior a la instalación en los mismos por medio de traumas, cirugías, dispositivos varios. Las formas clínicas pueden ser Nódulos Inflamatorios, Abscesos, Fístulas con material necrótico y úlceras 11,12. La especie M. Abscessus Complex comprende otras subespecies, M. Abscessus, M. Bolletii, M. Massiliense 13.
Los materiales o dispositivos quirúrgicos reutilzables como endoscopios, elementos de acupuntura, trocares, instrumentos de laparoscopia pueden ser objeto de contaminación con Mycobacterias. Al ser reutilizables y estar constituidos de una combinación de metales y materiales flexibles generalmente no son esterilizados en el más amplio concepto de esta palabra sino que son sometidos a procesos de Desinfección de Alto Nivel (DAN) con productos químicos líquidos por ejemplo el Glutaraldehido o gases por ejemplo el Óxido de Etileno. El correcto proceso de limpieza, tratamiento, empaquetamiento, control técnico y otros pasos durante la DAN determinan un menor riesgo y posibilidad de infección 14,15.
Es importante destacar que las MRG causan frecuentemente epidemias o seudoepidemias debido al foco de contaminación, su hábitat natural y a la fisiopatología de su instalación en los sitios de infección. Se han descrito varias de estas situaciones en países en vías de desarrollo donde la reutilización de dispositivos e instrumentos quirúrgicos es habitual debido a que no pueden ser esterilizados por la naturaleza del material del cual están hechos y por lo tanto son sometidos a Desinfección de Alto Nivel 16.
La cirugía laparoscópica se ha convertido en una de las formas más comunes de procedimientos quirúrgicos invasivos con sus consabidas ventajas pero también presentan algunas desventajas como son las infecciones de los puertos de entrada con gérmenes no comunes debido a la contaminación de los materiales quirúrgicos utilizados por una incorrecta DAN 16.
En el presente trabajo se estudiarán casos de pacientes operados con técnica laparoscópica y en cuya evolución se diagnosticaron infecciones de los puertos quirúrgicos por especies de MARG. El objetivo es describir las formas de presentación clínica y el abordaje general que permitieron establecer la sospecha diagnóstica necesaria para el correcto diagnóstico microbiológico y posterior tratamiento. También se hacen consideraciones en relación a las especies de MARG y a los resultados obtenidos.
MATERIALES Y METODOS
Pacientes consecutivos operados con técnica laparoscópica presentaron infección por MARG de la especie. Se describirán: el origen de la infección, la forma de presentación clínica y naturaleza de las lesiones, materiales remitidos al laboratorio, resultado de los cultivos, tratamiento antibiótico utilizado, técnicas quirúrgicas utilizadas y resultado final del tratamiento. Elementos como identidades y situaciones particulares se mantendrán anónimas.
RESULTADOS
Se registraron 11 casos consecutivos de infección de los puertos de acceso en cirugías laparoscópicas realizadas en un único centro quirúrgico. Todos estos pacientes fueron sometidos a estudios laboratoriales de rutina para una cirugía estándar, ninguno de ellos se encontraba inmunocomprometido. En todos los casos las condiciones del quirófano fueron las mismas. Los trocares, cámaras y otros elementos utilizados fueron sometidos a DAN con Glutaraldehido al 2% por 20 minutos y sometidos a lavado con suero fisiológico al 0.9% al momento de ser utilizados. No obstante el incorrecto proceso de desinfección de los instrumentos laparoscópicos fue aceptado como origen del brote luego de practicar una auditoría al respecto.
De los pacientes estudiados 2 fueron hombres y 9 mujeres. Las Cirugías realizadas fueron: 7 colecistectomías, 3 apendicectomías y 1 paciente con Conducto uracal permeable. En el cuadro 1 es posible apreciar cada caso en particular con un orden cronológico de aparición. El seguimiento máximo es de 14 meses y el mínimo de 10 meses, promedio de 1 año. Tres pacientes se mostraron insatisfechos con la situación y procuraron otros profesionales por lo que no se tiene seguimiento.
Todas las Colecistectomías se realizaron a 4 puertos y una de ellas fue convertida a cirugía abierta, las demás cirugías a 3 puertos. En todos los casos el puerto umbilical resultó afectado y los demás fueron afectados en forma variable. Las formas clínicas de presentación fueron Nódulos inflamatorios (N), Seudo tumor o lesión parecida al tejido que vemos en las reacciones a cuerpo extraño (ST) y Fístulas de trayecto sinuoso (F), Figura 1 al 3.
El paciente que desembocó en cirugía abierta hizo una contaminación e infección de la nueva incisión además de la umbilical. Tabla 1.
Todas estas cirugías se sucedieron en el lapso de 43 días momento en que se descubre el problema y se realiza una intervención técnica y científica a los fines de detener el brote epidemiológico. Es de destacar que otras cirugías no laparoscópicas se desarrollaron en el mismo ambiente quirúrgico y en el mismo periodo no resultando alguna de ellas comprometidas como caso de infección.
Todos estos pacientes fueron dados de alta con heridas sin signo alguno de complicación. En un periodo que varió entre 12 y 28 días contados desde la fecha de cirugía, estos pacientes volvieron con síntomas de infección local de las heridas de puertos laparoscópicos. Al principio las infecciones impresionaron ser a gérmenes comunes iniciándose por ello tratamiento con medidas locales, curaciones y retirada de hilos.
Ante la ineficacia del tratamiento local habitual se procedió a métodos invasivos quirúrgicos, solicitándose con el material extraído cultivos para gérmenes comunes, Micobacterias y hongos. El tratamiento quirúrgico realizado fue el de desbridamiento y resección de los nódulos y del trayecto fistuloso, en este último caso las fístulas atravesaban la aponeurosis pero no el peritoneo quedando depositado el material infeccioso en el pre peritoneo. Los primeros 8 en orden cronológico requirieron más de un procedimiento. En los pacientes en quienes no hubo seguimiento no se establecieron correctamente el número de procedimientos. Tabla 1.
En un solo caso el cultivo fue positivo para gérmenes comunes, stafylococus aureus, pero no correlacionaba con la clínica ni respondió al tratamiento pertinente y se perdió seguimiento posterior de este caso. Todos los cultivos fueron negativos para hongos. Los resultados del extendido y cultivo para Micobacteria se exponen en la Tabla 1. Uno de los materiales, el tercero en orden cronológico, fue remitido para estudio histopatológico y en el mismo se observó: Gran cantidad de tejido de granulación con proceso inflamatorio agudo y crónico granulomatoso con numerosas células gigantes de tipo reacción a cuerpo extraño, sin observarse microorganismos ni células neoplásicas.
De 5 materiales remitidos al laboratorio microbiológico 1 extendido con coloración de Ziehl Neelsen fue positivo, 20% reportando 7 Micobacterias en 200 campos examinados. Cuatro fueron los cultivos positivos, 80%. En los 3 últimos casos ya no se remitió material para cultivo y el tratamiento fue guiado por la clínica y la epidemiología.
Los cultivos positivos fueron informados como Micobacterias de crecimiento rápido a los 7 días. Por Reacción en cadena de la Polimerasa Asociada a Patrón Enzimático se obtuvieron Bandas 235/210 pb cn BstEII (Eco91I) y de 200/70/60 pb con HaeIII, patrón correspondiente a Mycobacterium Abscessus tipo2/ Mycobacterium Bolletii/ Mycobacterium Massiliense, especies del Complejo M. Abscessus, concordante con la velocidad de crecimiento. No se realizó secuenciación de ADN.
Varios pacientes presentaron síntomas sistémicos; fiebre y sudoraciones nocturnas y un paciente mialgias severas con impotencia funcional de miembros superiores, 6 en total, 54,5%. Todos estos pacientes presentaban la forma clínica de fistulas de todos los puertos y eran profundas y con abundante material inflamatorio en su interior. Este último dato no pudo corroborarse por falta de seguimiento en un paciente. Tabla 1.
Todos los síntomas sistémicos remitieron con el uso de ciprofloxacino, empírico y luego guiado por los cultivos. Tabla 1.
El estudio de sensibilidad antibiótica fue de la siguiente manera; Sensible a: Amicacina, Claritromicina, Ciprofloxacino, Trimetoprim + Sulfametoxasol, Imipenen. Se utilizó la combinación Claritromicina con Ciprofloxacino por 3 meses en todos los pacientes con síntomas sistémicos y en los demás solo por 2 semanas. Una paciente a quien se le había realizado ya un procedimiento de desbridamiento y resección del trayecto fistuloso se negó a un segundo procedimiento y prefirió recibir Claritromicina y Ciprofloxacino estando actualmente en el décimo mes con heridas cerradas pero con nódulos palpables. También en un caso un paciente no recibió coadyuvancia antibiótica y culminó tratamiento con procedimientos quirúrgicos exclusivos consiguiendo la cura total.
Es importante destacar que los resultados estéticos se perdieron en gran medida con las sucesivas maniobras quirúrgicas. La confianza en los profesionales intervinientes también fue cuestionada en varios casos y fue el motivo de la falta de seguimiento en algunos pacientes. Figura 4.
DISCUSION
Las infecciones de los de puertos quirúrgicos con Mycobacterias pueden producirse en pacientes inmunológicamente competentes, basta con la inoculación local de estos gérmenes. Aunque pacientes con déficit inmunológico tendrían mayor predisposición 17. La condición inmunológica de los pacientes en los casos presentados era normal.
Las auditorías realizadas determinaron que el origen de la infección fue la falta de seguimiento en forma correcta del protocolo de limpieza, empaquetado y posterior DAN con Glutaraldehido. La inoculación local de estos gérmenes es la forma de contagio y se debe al incorrecto proceso en la limpieza de los instrumentos laparoscópicos o en la DAN 9,16. En algunos países el Glutaraldehido se encuentra proscripto para estos fines 9.
El inicio de los síntomas, 12 a 28 días en este estudio y coincidente con otros reportes de 3 a 4 semanas 16 condiciona una demora en el diagnóstico y sumado al origen común de contagio tienden a causar casos consecutivos conocidos como seudoepidemias o epidemias nosocomiales 15,18. Debido a lo mencionado cuando se presentan los primeros casos y se genera la sospecha clínica que motiva la solicitud de cultivos específicos y el retorno de los mismos, ya ha transcurrido suficiente tiempo como para que se hayan generado otros contagios nuevos en el mismo ambiente quirúrgico.
Las formas clínicas en que las lesiones se presentan son ampliamente descritas en la literatura 11,16,17 y en relación a las que se presentaron en esta casuística coinciden plenamente, quizás el término seudotumor requiera otra acepción pero a la descripción es la misma que han visto otros autores.
El tratamiento inicial dirigido a infecciones comunes y el posterior giro hacia enfoques más invasivos suele ser la característica común en estas situaciones, debido a que las infecciones de los puertos laparoscopicos habitualmente son a gérmenes comunes, 8%. Excepcionalmente se producen estos brotes a MARG y por un periodo muy limitado que dificulta los cálculos de prevalencias o incidencias. La mayoría de los autores reportan solo algunos casos y brotes temporales 9,15,19.
Desde el punto de vista histopatológico las biopsias pueden presentar 3 patrones básicos; granuloma nodular con inflamación difusa, predominantemente absceso y granuloma sin componente de neutrófilos. En todos estos patrones la posibilidad de observar Bacilos es de solo 27% 21. El único material estudiado por histopatología no observó BAAR y fue de patrón granuloma nodular con inflamación difusa.
Los síntomas sistémicos principalmente fiebre son reportados por los diferentes autores 10,20 y estuvieron presente en algunos de estos pacientes sobre todo los que presentaron fístulas profundas y sinuosas con alto contenido granulomatoso. Sudoración nocturna aparentemente no se registran en infecciones cutáneas aunque es común en infecciones pulmonares 10. Mialgias importantes con afectación pulmonar no se ha publicado previamente.
El tratamiento con antibióticos se caracteriza por los siguientes puntos: Alta resistencia, tratamiento prolongado y utilización de al menos 2 antibióticos combinados 4,9,10,17,23,24. Los resultados de Sensibilidad Antibiótica en esta casuística fueron utilizados en las citas de referencia. De importancia mencionar que el Ciprofloxacino fue muy importante en forma empírica para abolir los síntomas sistémicos.
Los resultados del laboratorio microbiológico mejoran considerablemente con la solicitud de cultivo específico de MARG una vez establecida la sospecha clínica. La comunicación directa con el microbiólogo es muy importante. Las especies ahísladas del M. Abscessus Complex han sido encontradas en otros reportes 9,10,15,18,22 tanto el M. Abscessus tipo 2 y el M. Bolletii. Además se ha reportado la presencia del M Masiliensse en muchos casos 24. Recordemos que no se hemos realizado secuenciación de ADN.
Los resultados estéticos y las molestias ocasionadas suscitaron ciertas dificultades en la relación médico paciente, situación lógica y ya mencionada por otros autores 25.
CONCLUSIONES
Estas epidemias nosocomiales pueden sorprender al médico y volverse catastróficas si no se realiza el diagnóstico etiológico a la brevedad posible con la consiguiente toma de medidas pertinentes.
Todos los pasos realizados antes y durante el proceso de Desinfección de Alto Nivel son importantes e imprescindiblemente debe ser realizado por profesionales entrenados para el efecto.
La comunicación con el microbiólogo enfatizando la sospecha clínica mejora los resultados de los cultivos y por lo tanto adelanta el correcto tratamiento en estas situaciones.
El tratamiento quirúrgico agresivo y realizado lo antes posible mejora la evolución y se esperaría en estos casos un mejor resultado estético.