INTRODUCCIÓN
El turismo, considerado como uno de los sectores con más crecimiento a nivel mundial, se ha convertido en una importante fuente de ingresos con oportunidades y desafíos para las empresas turísticas nacionales y equipos de gobierno locales en muchos países (Airbnb, 2019). Según la Organización Mundial del Turismo (OMT), el último barómetro del año 2021 notifica que el turismo tuvo una tasa de crecimiento del 4% en las llegadas de turistas internacionales, manteniéndose en un 72% por debajo de los niveles pre pandémicos. A pesar de un ritmo lento y desigual en la recuperación de la actividad del sector en todo el mundo, los factores determinantes se concentran en las restricciones a la movilidad entre países, tasas de vacunación y, junto a ello aparece un nuevo e importante elemento nivel confianza de los viajeros (OMT, 2021). En los últimos 10 años se ha venido apostando a una actitud más crítica con respecto a los modelos turísticos masivos imperantes a nivel mundial, no simplemente desde el ámbito académico-científico, sino el sector empresarial y profesional del turismo también han manifestado a favor de ello, incluso en las esferas de ciertas Administraciones Públicas, quienes muchas veces suelen ser esquivas ante este ámbito (Rivera y Rodríguez, 2012).
Actualmente, existe una clara tendencia que la actividad turística está en pleno proceso de cambio y, los que decidan apostar por el turismo en tiempos de pandemia deberán de actualizar la concepción y ajustar la estructura de los destinos turísticos. Al abordar el tema de la planificación territorial del sector, se está obligado a considerar los principios de la sostenibilidad (Palomeque, 2007) caracterizado por el equilibrio que se la da a sus ejes, al ser económicamente viable, socialmente justo y respetuoso con el medio ambiente. Todo esto no debe implicar cambios radicales para el territorio, puesto que el paradigma de la sostenibilidad supone la revalorización del territorio y de cierta forma, debe existir una reorientación en la planificación y gestión turística de los destinos (Vera, 2001; Palomeque, 2007). Cabe mencionar que los paisajes culturales son resultados de la constante búsqueda de diferenciación de los pueblos, encausado en el bien común y desarrollo sostenible de las poblaciones, mediante procesos de conservación y modificación de su patrimonio, es decir, considerados como bienes culturales, producto de la acción humana y la naturaleza, que ilustran la evolución de la sociedad a lo largo del tiempo bajo la influencia de restricciones físicas, de las posibilidades de su entorno natural y de las fuerzas sociales, económicas y culturales sucesivas, tanto externas como internas (United Nations Educational, Scientific and Cultural Organization [UNESCO], 2017).
A nivel nacional, Ecuador posee una gran diversidad de culturas y etnias vivas, a lo largo de sus cuatro mundos (Costa, Andes, Amazonía, Galápagos) lo cual genera el ambiente ideal para el fortalecimiento de las comunidades locales mediante el aprovechamiento del turismo rural. La ruralidad en la provincia de Manabí se la puede ubicar dentro del mundo Costa, dentro del cual existen diferencias entre sus estilos de vida pero predomina un concepto similar en el desarrollo productivo y en la organización social, lo cual hace que su riqueza rural tenga características muy peculiares, dependiendo del sitio visitado (Félix y Doumet, 2016). La situación productiva del cacao en la provincia de Manabí, así como las posibilidades de desarrollo regido por una política de revalorización cultural sostenible, merece la atención de los organismos de gobierno local y de las instituciones de protección e investigación (Félix et al., 2021a). Por lo tanto, la presente investigación busca aplicar los modelos CARE Y CANVAS para la construcción del paisaje cultural del cacao en la provincia de Manabí, Ecuador. Esta metodología está basada en la experiencia desarrollada por el Healthy Destinations Lab estructurado en la ciudad de Igualada en Cataluña-España, a manera de cooperación público-privada entre el Ayuntamiento local y la empresa encargada de la plataforma internacional de departamentos de alquiler AIRBNB. Éstos buscan a través de un plan de acción enmarcado en la participación activa de la sociedad local, generar un nuevo modelo inclusivo de turismo sostenible para nuevos destinos turísticos. El método CARE es una aproximación, sin ánimo de exhaustividad, a lo que cualquier municipio o conjunto de municipios debería realizar de manera previa a la decisión de convertirse en un destino turístico. Tras decidir hacia dónde se quiere ir en cuestiones turísticas, se ha de entender con una mínima profundidad en qué punto se encuentra ese potencial destino y qué recursos económicos, humanos, tecnológicos, de infraestructuras necesita para llegar a donde se ha decidido (Airbnb, 2019). Mientras que el modelo Canvas es la herramienta que se utiliza para analizar y generar modelos de negocios, pero en forma sintetizada. Esta herramienta pude visualizarse mediante el desarrollo de un lienzo dividido en varios aspectos relevantes a conocer del negocio, últimamente esta herramienta está sirviendo de mucha utilidad en la co-creación de productos y destinos turísticos.
METODOLOGÍA
Se basó en un enfoque cualitativo de corte transversal. Se utilizó como estudio de caso al Paisaje Cultural del Cacao en la provincia de Manabí, Ecuador. Una provincia localizada en el emplazamiento centro noroeste del Ecuador y dividida por el cruce de la línea equinoccial. La capital de la provincia es la ciudad de Portoviejo declarada últimamente como una de las ciudades creativas de la UNESCO en el rubro gastronómico. Sus límites son al oeste con el Océano Pacífico, al norte con la provincia de Esmeraldas, una gran productora de cacao, al este con la provincia de Santo Domingo de los Tsáchilas y provincia de Los Ríos, al sur con la provincia de Santa Elena y al sureste con la provincia del Guayas. La provincia de Manabí tiene una superficie total de 18.440 km² y la distribución de la producción de cacao se desarrolla a lo largo de dicha provincia (ver Ilustración 1).
Para el estudio actual se tomó como referencia, la zona centro norte de la provincia, la misma que posee la mayor producción de cacao en el territorio. Las condiciones climáticas de la zona centro norte de Manabí, con temperaturas promedios de 26-28°C y precipitaciones de 1800-2000 mm anual (Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología [INAMHI], 2012), presentan condiciones inmejorables para el desarrollo de los cultivos de cacao. Se consideraron representantes de cinco de los cantones de la zona centro norte, puesto que son los más representativos en plantaciones de cacao, con una superficie total de plantación de 93.164 ha aproximadamente. Asimismo, el cantón Chone (48.052 ha), es la superficie más representativa del área de estudio, seguida de El Carmen (21.447), Pichincha (21.378 ha), Flavio Alfaro (14.791 ha), Portoviejo (2.897,7 ha) y Bolívar (6.054 ha). Éstos dos últimos son considerados como los de menor superficies en el área de estudio (Barrera et al., 2019) (ver Ilustración 2).
Se aplicó el modelo desarrollado por el Healthy Destinations Lab, consistente en la realización de talleres participativos y levantamiento de información mediante la aplicación del método CARE y CANVAS. Se realizaron dos talleres participativos en las instalaciones del Hotel Higuerón de la Escuela Superior Politécnica Agropecuaria de Manabí (ESPAM) y, liderados por docentes de las carreras de Turismo, Ingeniería Agroindustrial e Ingeniería Agrícola de la misma institución. Los talleres fueron dirigidos a representantes de sectores públicos y privados, relacionados a la producción del cacao en la zona norte de Manabí. Se pudo contar con la participación de representantes de instituciones públicas gubernamentales como: Ministerio de Turismo (MINTUR), Instituto Nacional del Patrimonio (INPC), Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (INIAP), Gobierno Autónomo Descentralizado de la Provincia de Manabí, Gobiernos Autónomos Descentralizados Cantonales de Chone y Bolívar y, desde el sector privado representantes de empresas como Corporación Fortaleza del Valle, Empresa Italiana Kaacao y la Asociación Gastronómica Gasam. Se reunió a 32 participantes durante los dos días de talleres: 12 miembros en el primer taller (T1) y 20 en el segundo taller (T2) realizados entre los meses de diciembre de 2021 y enero de 2022. Durante los talleres, se estructuraron 9 mesas de trabajo (4 en el T1 y 5 en el T2) con la participación equilibrada de miembros tanto de las empresas públicas como las privadas y liderados por miembros de la academia (ver Tabla 1). La duración de cada uno de los talleres fue de aproximadamente de cuatro horas cada una, divididos en varias secciones (presentación inicial, introducción y tópicos a tratar, aplicación de herramientas participativas y discusiones finales) y cada una de las etapas comprendía el uso de una hora.
Taller/Fecha | #Mesa | #Participantes | Herramienta | Datos |
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Taller 1 (T1) Diciembre 2021 | 4 | 12 | Matriz CARE | Capacidad, Accesos y conexiones, Recursos y servicios y entorno. |
Taller 2 (T2) Enero 2022 | 5 | 20 | Modelo CANVAS | Grupos de interés, propósito del destino, actividades claves. Recursos claves, segmentación de turistas, herramientas de comunicación, medición de impactos, regulación, inversión necesaria y medios de financiación. |
Fuente: Elaboración propia (2022)
Las herramientas que se utilizaron fueron la matriz CARE en T1 y modelo CANVAS en T2. En cuanto al primero, las variables contempladas fueron Capacidad referente a los tipos y números de alojamientos disponibles en el lugar analizados, Accesos y conexión relativo al transporte colectivo privado/colaborativo junto con el grado de accesibilidad, Recursos y servicios alusivo a las culturas, gastronomías, paisajísticos y experiencias. Asimismo, las variables analizados en el modelo CANVAS fueron: los Grupos de interés (grupos claves y el papel desempeñado por dichos grupos de interés), Propósito como destino (razón de querer convertirse en un destino, valor agregado para ser un destino, entre otros), Recursos claves (disponibilidad e insuficiencia de recursos), Segmentación de turistas (tipos de turistas a atraer, motivos de sus viajes, medio de comunicación, etc.), Mediación de impacto (forma de medir el impacto de la actividad para la comunicación y el medioambiente), Actividades claves (actividades relevantes para el turista y responsables de dichas actividades), Herramientas de comunicación (modo de posicionar el destino, herramientas para la promoción, etc.), Regulación (regulación actual y ajustes necesarios para el desarrollo de la actividad turísticas), Inversión necesaria (presupuesto) y Vías de financiamiento (opciones disponibles para la financiación del proyecto). Ver Figura 1 y 2.
Los procedimientos para la realización de los dos talleres consistieron en los siguientes pasos: Una vez conformado las mesas, se distribuyeron las plantillas impresas entre los participantes incluyendo las indicaciones para las actividades a realizarse. Inmediatamente, a través de un secretario se procedió a evaluar los componentes de las herramientas (CARE y/o CANVAS) y de manera consensuada entre los participantes de las mesas se identificaron los factores de relevancia para los diversos apartados.
Finalmente, se procedió a presentar los resultados de las dos herramientas por cada una de las mesas. Además, dichos resultados fueron acopiados en una base de datos para ser analizados bajo dos aspectos: enraizamiento (similitudes de criterios) y densidad (coincidencias de respuestas).
RESULTADOS
Después de haber realizado los dos talleres sobre la construcción del turismo sustentable del Paisaje Cultural del Cacao, mediante los métodos CARE y CANVAS, de la provincia de Manabí en Ecuador con una participación de 32 participantes, se obtienen los resultados más relevantes:
En cuanto a los resultados de la matriz CARE. Esta herramienta ayuda a determinar los aspectos críticos que otorgan un cierto nivel de pre factibilidad del destino turístico e identifica factores relacionados a Capacidad, Accesos y conexiones, Recursos y servicios y el Entorno.
Capacidad
Este aspecto enfoca a la capacidad del destino para poder alojar a los viajeros que visiten los cantones pertenecientes al Paisaje Cultural del cacao, es decir, a los cantones Portoviejo, Pichincha, Bolívar, Chone, Flavio Alfaro y El Carmen (considerados como los cantones con mayor producción cacaotera). En primera instancia y de forma lógica se encuentra los hoteles, hostales y hosterías registradas en el catastro del Ministerio de Turismo (MINTUR) a excepción de Pichincha que no consta con ningún establecimiento en el registro oficial (ver Tabla 2).
Cantón | Establecimientos Registrados | Habitaciones | Camas | Plazas |
---|---|---|---|---|
Portoviejo | 88 | 1861 | 3111 | 4049 |
Bolívar | 6 | 60 | 60 | 120 |
Chone | 11 | 158 | 203 | 292 |
Flavio Alfaro | 2 | 15 | 15 | 30 |
El Carmen | 17 | 327 | 385 | 588 |
Totales | 124 | 2421 | 3774 | 5079 |
Fuente: Adaptado de Ministerio de Turismo del Ecuador (2022)
Desde la perspectiva de los actores del desarrollo local, tanto públicos como privados, se presentan como una gran oportunidad para ampliar la capacidad de alojamiento del destino las modalidades de alojamientos alternativos, tales como: las casas rodantes, el camping y el glamping. Estas tres opciones tuvieron un alto grado de coincidencia entre las propuestas de las mesas de trabajo.
La provincia de Manabí es conocido por su alto porcentaje de ruralidad y; por ende, se puede generar espacios naturales y de baja inversión con el fin de que el turista pueda tener una experiencia vivencial. Asimismo, las casas de huéspedes (representan la categoría más básica y de fácil registro en el MINTUR) pueden iniciar los emprendimientos desde la implementación de una sola habitación con ciertos requisitos básicos y, los alojamientos comunitarios podrían ejecutarse invirtiendo las cabañas compartidas tipo refugio. Dichas oportunidades pueden darse en propiedades de los mismos productores de cacao, quienes deberían de capacitarse y certificarse en el rubro. Por último, la construcción de cabañas ecológicas -bungalós- en los predios de los productores o cabañas en los árboles, son otras de las propuestas otorgadas por los participantes durante el taller. Todas las opciones, previamente mencionadas, tienen un enfoque de elevar el valor agregado de las fincas y, generar experiencias de más alta calidad para los visitantes del lugar.
Accesos y conexiones
Manabí, una ciudad estratégica para la conectividad del Pacífico Sur, cuya ubicación geográfica está determinada en la latitud: -0.950022 y longitud: -80.7162 0° 57′ 0″ Sur, 80° 42′ 58″ Oeste, posee 30.900 hectáreas o 309,00 km² de extensión territorial más un clima tropical seco (Gobierno Provincial de Manabí [GPM], 2021). En esta ciudad se encuentra el aeropuerto “Eloy Alfaro” considerado como el más importante de la provincia y el puerto de aguas profundas más importante del Ecuador, manejado por la Autoridad Portuaria de Manta (GPM, 2021). Estos dos puntos de acceso estratégico se encuentran a tan solo a una hora de distancia de la ciudad de Chone, la misma que estratégicamente está considerada como el centro del Paisaje Cultural del Cacao por su ubicación geográfica, nivel de producción e importancia histórica. Cabe mencionar que también se encuentra la pista de aterrizaje de Los Perales en el cantón San Vicente, 30 minutos de la ciudad de Chone, pudiendo convertirse en las conexiones y/o accesos marítimos y aéreos de mayor relevancia para la presencia del turismo internacional.
En el ámbito terrestre se encuentra con dos arterias importantes para la circulación de la región, las mismas presentan como coyuntura entre la región de la sierra y la costa. En primera instancia, los participantes identifican la importancia de la Vía Colectora Santo Domingo-Rocafuerte (E38, con 200 km. de extensión), donde la misma conecta la provincia de Santo Domingo de los Tsáchillas con el centro de Manabí, un nexo de relevante con la capital ecuatoriana Quito (a solo seis horas de distancia). Y la ruta Vía Colectora Chone-Pimpiguasí (E 384, con 60km de extensión), la cual conecta varios cantones del paisaje cacaotero para su comercialización y traslado a los centros de acopios de la provincia. Estas vías se encuentran en continuo mantenimiento, por lo cual representa una ventaja competitiva para la región y otorga grandes posibilidades de alta circulación de vehículos en la zona.
Recursos y servicios
Se identifica que la mayor valoración de los recursos de la zona está enfocada en dos grandes grupos. Por un lado, se encuentra una alta valoración a los recursos naturales (bosques, ríos, cascadas y flora y fauna) y por el otro lado, la cultura manabita como lo es la gastronomía, posicionada en el sitial más alto de las cocinas del país (Vega et al., 2018). Los corredores gastronómicos que se encuentran en la costa interna de la provincia, se presentan como un gran potencial a desarrollar dentro de la construcción de destinos, contribuyendo de forma directa a la economía local de las zonas rurales (Félix, 2020; Félix et al., 2021a). Además, se cuenta con una valoración importante para las actividades agro turísticas, relacionado con la cadena de valor del cacao en Manabí, pero tomados como posibles recursos de atracción y servicio turístico a las plantaciones de cacao en las fincas, los centros de acopio en las asociaciones, las fábricas de elaboración de chocolate y derivados, las actividades dedicadas a la recolección del producto y posterior secado, etc. como naturaleza cultural. Todos ellos se encuentran relacionados directamente a los procesos antropológicos del territorio, como también así a la naturaleza comercial. En ambos casos, tratan de lograr una comodificación exitosa de los procesos para ser comercializados como experiencias turísticas en el destino.
Por último, la biodiversidad del territorio al encontrarse algunas áreas protegidas cercanas como: El refugio de Vida Silvestre Isla Corazón, el Humedal La Segua, las represas de Rio Grande y La Esperanza, entre los principales recursos paisajísticos de la zona, pueden ser canalizados a través de experiencias vivenciales junto con las actividades de aventura como senderismo, observación de aves y deportes acuáticos. Los recursos culturales salen a la luz dentro del debate de los participantes, encabezado por las tradiciones orales como los amorfinos y chigualos, los usos y saberes tradicionales del cacao fino de aroma (todos declarado patrimonio inmaterial del Ecuador en el 2017), los tejidos de sombreros de paja toquilla (patrimonio de la humanidad) y mocora.
Entorno
En esta variable se denota una cohesión social y conocimiento de la superestructura existente alrededor del cacao. Esto sienta bases importantes para el levantamiento de propuestas con enfoque en el territorio, primero se observan coincidencias en los criterios que para desarrollar este destino debe existir un trabajo colectivo entre las instituciones gubernamentales presentes en el territorio y los gobiernos locales, para aunar esfuerzos, en pos de conseguir implementar y posicionar al destino nacional e internacional. Luego, lograr una articulación importante entre el sector público y privado con el fin de canalizar los recursos; realizar mejoras de infraestructura alrededor de los recursos turísticos con el objetivo de generar las condiciones adecuadas para optimizar el gasto del turista, y así, reflejarse en el desarrollo socio económico de las comunidades cacaoteras locales.
El fortalecimiento de las comunidades es otro factor clave de estas actividades. Existen experiencias exitosas previas relacionadas a la asociatividad en la comercialización del cacao (corporaciones con más de mil socios). Dicho modelo podría volver a replicarse con enfoque a la actividad turística basado en el sistema de desarrollo de turismo comunitario y, de esta manera lograr el empoderamiento de las acciones de promoción y comercialización en el territorio a largo plazo.
Finalmente, se plantea la necesidad imperiosa para el fortalecimiento del talento humano en el territorio. Se sugieren la estructuración que certifique y avale las diversas actividades turísticas en el territorio e inducir a los productores a la formación continua en el ámbito del servicio. De acuerdo con esto, se obtendría una base sólida fundamentada en la hospitalidad y la calidad de sus servicios, en especial, por parte de las comunidades y empresas locales del paisaje cultural del cacao en Manabí.
En cuanto a los resultados del modelo CANVAS. Trata de una herramienta de trabajo que utilizan generalmente en el ámbito empresarial, en especial, en la fase inicial. En ella se buscan ordenar las principales ideas y tener un panorama holístico del proyecto. Actualmente, esta metodología es utilizada también para los procesos de construcción de destinos con resultados comprometedores (Airbnb, 2019). El análisis de los componentes del lienzo está divida en 10 apartados a saber: Grupos de interés, Propósito como destino, Recursos claves, Segmentación de turistas, Mediación de impacto, Actividades claves, Herramientas de comunicación, Regulación Inversión necesaria y Vías de financiamiento.
Grupos de interés
Se identifican varios grupos de interés durante los talleres, principalmente las comunidades locales ubicadas en las zonas rurales de los cantones con más alta producción del cacao. Seguido, también se identifican grandes productores de cacao relacionando en este apartado a las asociaciones dedicadas a la comercialización de este producto como por ejemplo Fortaleza del Valle (la mayor corporación cacaotera de la zona que agrupa a más de mil socios); Asociación la pepa de Oro y Piedra de Plata (donde se encuentran árboles centenarios de cacao certificados y en proceso de conservación), quienes podrían tener injerencia en el desarrollo de productos turísticos locales; gremios de transportistas y comercializadores de cacao (quienes podrían identificar posibilidades de negocio y dinamizar los actuales mediante el flujo de visitantes a la zona). También se señalan las oportunidades para el desarrollo de proyectos en conjuntos (empresas públicas y privadas del sector) alrededor de la cadena de valor del Paisaje Cultural. Por último, se denota la relevancia de la presencialidad de la academia junto las ONG´s dedicadas a los rubros productivos, agropecuarios y turísticos, durante el proceso e intervención del proyecto.
Propósito del destino
Unas de las respuestas con mayor diferimiento entre las mesas. La percepción en la busca de la práctica con el paisaje cultural del cacao ha tenido mayor frecuencia de respuesta. Algunos ejemplos son: elevar el valor identitario de la cultura cacaotera y manabita, distribuir el uso equitativo de los recursos, la sostenibilidad económica de las familias, los propósitos que se enmarcan en el concepto del desarrollo sostenible, el desarrollo importante de las comunidades y el rescate del patrimonio cultural de los cantones vinculados al proyecto. En adición, temas relacionados a la innovación, el desarrollo tecnológico y posicionamiento de una imagen fresca de un destino regional, como valores importantes a promover mediante esta propuesta también fueron discutidos. Se denota una claridad importante de criterios y elevados estándares en los propósitos identificados por parte de los actores locales, para el desarrollo de uno de los primeros destinos de la costa interna y uno de las primeras iniciativas turísticas regionales de la provincia.
Actividades Claves
Es importante determinar los pasos para la realización de la propuesta del proyecto. Las propuestas han sido muy puntuales y son ordenadas en orden de densidad de respuesta y ellos son: socialización y divulgación de la propuesta en todo el territorio, realización de convenios entre actores públicos y privados de la localidad, estructuración de un ente regulador de la propuesta, alianzas estratégicas intersectoriales, promoción del destino, formación del capital humano, mejoramiento de servicios básicos, búsqueda de financiamiento, mejoramiento de los servicios turísticos y certificaciones de diversas índoles. Como se observa, el abanico de respuestas ha sido muy amplio, pero en el caso de las mesas estos factores se han repetido en su mayoría.
Recursos Claves
En esta variable existen coincidencias con los factores identificados durante la aplicación del análisis CARE. Los recursos identificados en función a la repetición de las respuestas o densidad de respuesta son: la historia y cultura local, recursos naturales (flora y fauna), gastronomía, actividades agro productivas, entorno paisajístico, características geográficas, hospitalidad de las comunidades, las asociaciones, empresas productoras de chocolates y fincas cacaoteras. Como vemos se han desplegado una serie de alternativas a tomar en cuenta para las futuras implementaciones, certificaciones y procesos de servucción turística.
Segmentación de turistas
Se definen características importantes de los posibles nichos de mercados. La mayor cantidad de coincidencias de temas encontradas son: los turistas nacionales e internacionales con similares proporciones de respuestas, el turismo vivencial apunta como un factor a tener en cuenta por parte de estos actores locales, el turismo gastronómico también aparece con mucha fuerza debido a las características del territorio antes explicadas. Asimismo, los estudiantes y las familias aparecen con otros segmentos a los cuales habrá que tener en cuenta, esto es debido a que en la zona existe la presencia de varias universidades que atraen a estudiantes de otras latitudes del país y, se pueden convertirse en potenciales consumidores de turismo local. Finalmente, se enfocan las respuestas en los jubilados, los mismos que son idealizados a través del segmento de cruceristas que llegan todos los años al Puerto de Manta.
Herramientas de comunicación
En este apartado predominan las redes sociales como la respuesta más común, existen pequeños destinos en la zona que durante la pandemia han logrado un posicionamiento importante mediante el uso de las redes sociales. La televisión (provincial y nacional) fue la segunda respuesta en la que se hace énfasis como el segundo medio más importante para promover la información. Otros como la radio de niveles locales y provinciales, la elaboración de folletería impresa y digital, la elaboración de una página web del paisaje cultural cacaotero. No obstante, las operadoras de turismo y la presencia en ferias, no son consideradas elementos de comunicación principales para esta propuesta. Esto se debe a que la cultura del empaquetamiento es muy baja en el Ecuador y la mayoría de los turistas internos e internacionales viajan independientemente a lo largo del país.
Medición de impactos
En cuanto a las respuestas relacionadas a como se pretende medir los impactos provocados por el turismo en el territorio, se encuentran las siguientes respuestas: realización de asambleas comunitarias y asociativas, mediante la creación de un comité general del paisaje cultural del cacao, mesas de trabajos permanentes, elaboración de cuestionarios impresos y online para medir la percepción del visitante y la creación de un observatorio turístico. Para controlar temas de sostenibilidad y bioseguridad se plantea realizar estudios continuos de capacidad de carga para senderos, plantas industriales, fincas agras turísticas, entre otros, con el fin de generar una semaforización para llevar el control de aforos en las empresas de prestación de servicios.
Regulación
La regulación del paisaje cultural también ha generado un sin número de puntos de vistas. Por una parte, se propone la creación de normas y políticas de manejo para todos los negocios y turistas a lo largo del paisaje cacaotero bajo un control netamente gubernamental, creación de organismos comunitarios o un ente regulador a nivel general y creación de un código de ética y manuales de buenas prácticas turísticas para los negocios locales.
Inversión necesaria
En este apartado se da una orientación a los recursos que puedan llegar a invertirse mediante la presente propuesta. Los diferentes enfoques de respuestas caen en la mantención o mejora de infraestructura vial a lo largo del paisaje cultural cacaotero, inversión en facilidades turísticas, señalización especializada a lo largo de los recursos turísticos, fortalecimiento del talento humano (capacitaciones), creación de parques temáticos en los diversos cantones que conforman la propuesta, mejoramiento de la seguridad ciudadana en estos cantones, manejo de desechos sólidos y otros servicios básicos alrededor de los recursos turísticos.
Vías de financiación
Sobre el tema más álgido se obtuvieron respuestas como que el grueso de la inversión en el territorio debe venir de las entidades gubernamentales locales y nacionales, junto a los actores privados mayormente beneficiados en el territorio. Se tiene claro que el impacto social de la propuesta se presta para captar importantes cantidades de recursos económicos de organismos no gubernamentales, donde también se accede a financiamientos nacionales e internacionales por parte de las entidades públicas. Finalmente, aplicar a fondos no reembolsables de organismos como la unión europea, sin dejar de lado que deben existir líneas de créditos atrayentes para la dinamización de emprendimientos en el paisaje cultural cacaotero de Manabí.
DISCUSIÓN
Las proyecciones de crecimiento del turismo internacional en el 2022 son importantes para la recuperación general de la actividad turística mundial, que se daría ya desde el año 2023 (World Tourism Organizations, 2021). Debido a esta tendencia futura, los países que decidan apostar a la creación de nuevos destinos turísticos deberán trabajar arduamente desde la concepción de sus ideas. El involucramiento de los actores sociales es fundamental para orientar los esfuerzos de transformación del territorio hacia una sola vía y ésta debe apuntar hacia el desarrollo turístico sostenible. El mismo debe involucrar aspectos diferenciadores en su oferta con un alto componente vivencial en sus productos que permita generar de alguna manera la diversidad. Junto a esto se busca también atraer diversos segmentos de mercado, generando de esta manera competencias importantes dentro de las regiones, lo que permitirá un continuo mejoramiento de la prestación de servicio y mantenimiento de las infraestructuras estaduales. Sin olvidar que la formación de destinos regionales que trasciendan fronteras son temáticas importantes para el desarrollo de las culturas locales y conservación del patrimonio material e inmaterial. Las características intangibles de las culturas tienden a deteriorarse, por lo que es imprescindible aprender a valorar a tiempo nuestro legado.
Lo que se entiende por paisaje comprende más allá de una definición conceptual fría, ésta debe adaptarse al territorio mediante un triángulo exitoso entre espacio, tiempo y tipo de sociedad (Mayorga, 2015). Se puede afirmar que la representatividad, legitimidad y eficiencia de la institucionalidad de los productos agrícolas, constituyen un factor estratégico para la sostenibilidad de los paisajes culturales y, de esta manera favorecer la transmisión y el cumplimiento de la normatividad para su manejo (Ministerio de Cultura de la República de Colombia, 2011). La valoración del paisaje cultural como patrimonio y la apropiación social por parte de sus habitantes locales, posibilitan la sostenibilidad económica, social y medioambiental del territorio, puesto que la cultura constituye el eje fundamental para el desarrollo integral de los pueblos (Gómez, 2015). La apropiación del concepto de paisajes culturales por parte de los habitantes del territorio, nace a partir de los procesos de valoración y estos son fundamentales para el diseño de estrategias no solo para el desarrollo del turismo, si no también, para la elaboración de un adecuado plan de manejo del destino como tal (Urte, 2007). Con el interés de incrementar o fortalecer los segmentos de turistas de naturaleza, se debe diversificar y mejorar la calidad de la oferta de productos (Osorio et al., 2017).
En la provincia de Manabí-Ecuador, la cadena de valor del cacao ha encontrado varias dificultades en los procesos de producción, acopio, agroindustria y comercialización debido a las amenazas de factores externos como la propia producción, consumo y presencia o no de intermediarios en la comercialización (Barrera et al., 2019). La presencia del paisaje cultural del cacao en la zona centro norte de la provincia de Manabí, representa una oportunidad para elevar la percepción del producto a nivel mundial, lo que puede ayudar al mejoramiento de todas estas brechas antes identificadas, generando oportunidades directas de desarrollo socioeconómico a las comunidades rurales manabitas. En el caso del paisaje cultural del cacao en Manabí existen grandes posibilidades de vincular los servicios turísticos a las actividades agras productivas. Dentro de la cadena del valor del cacao encontramos factores positivos como: gran potencial agroecológico natural para la producción del cacao, producción de un cacao de calidad, cacao ecuatoriano es reconocido en el mercado internacional, existe una demanda mundial sostenida y persistente del cacao, el cacao tiene una producción tradicional y es considerado como una cadena productiva que funciona (Vassallo, 2017).
Cabe recordar que la presente investigación busca generar valor agregado para el turismo a través de una declaratoria de paisaje cultural del cacao en la provincia de Manabí, Ecuador. Este tipo de declaratorias están basadas en diez criterios exigidos, relacionados a generar ventaja competitiva alrededor del patrimonio agrario de un territorio. La provincia de Manabí en Ecuador resalta dos de estos criterios según la UNESCO (2021): Ser un ejemplo sobresaliente de un asentamiento humano tradicional, uso de la tierra o uso del mar que es representativo de una cultura (o culturas), o interacción humana con el medio ambiente, especialmente cuando se ha vuelto vulnerable bajo el impacto de un cambio irreversible. Y, estar asociado directa o tangiblemente con acontecimientos o tradiciones vivas, con ideas o con creencias, con obras artísticas y literarias de destacada importancia universal.
En el presente estudio cabe destacar que debido a la falta de control por parte de las autoridades en esta zona, no todos los establecimientos de alojamiento y de alimentos y bebidas se encuentran registrado oficialmente en el MINTUR, por lo que la cantidad mostrada en la Tabla 2 fácilmente puede duplicarse en la realidad.
En cuanto al análisis de la matriz CARE, éste ha permitido determinar factores de suma importancia para el desarrollo del destino, comenzando con el mejoramiento de la capacidad de alojamiento con posibilidades de implementación en el territorio a través de modalidades como: las casas de huéspedes, el camping y el glamping, los mismos que pueden ser financiados mediantes programas de colaboración nacionales e internacionales que fomenten estos rubros; la identificación de los accesos marítimos y aéreos e importancia de las vías estaduales; la identificación de los recursos con potencial turístico que van desde los naturales (cascadas y ríos).
Se han podido identificar una gran cantidad de recursos naturales encabezados por la Cascada del Salto del Armadillo, el humedal La Segua, las represas de Rio Grande y la Esperanza, la ruta de las cascadas de Chone, entre otras como las más importantes, debido a los servicios que prestan y su infraestructura existente para el desarrollo de la actividad turística, si bien, no se lleva una estadística exacta de los visitantes en estos recursos, estos destacan por su alta afluencia de turistas nacionales durante los fines de semana y feriados, lo que consolida la idea de que sean los recursos que complementen el imaginario del paisaje cultural del cacao. Por otra parte, se encuentran los recursos culturales encabezados por la gastronomía local, reconocida a nivel nacional la gastronomía típica manabita, es sin duda, uno de los principales recursos de atracción que se identifican en la zona norte encabezado por la tonga de gallina y los productos relacionados derivados de la leche, a lo cual se transforman en los referentes culinarios de la región. Por último las áreas protegidas de la zona se identifican como recursos con una superestructura bastante clara, donde cada institución o empresa, tiene claro el rol que desempeña en la zona y la forma de como contribuir a la propuesta. Con todos los datos obtenidos mediante la utilización de la matriz CARE, se puede observar que esta herramienta es muy eficiente para canalizar información obtenida mediante la utilización de técnicas de reflexión y análisis de participación grupal, como lo es la lluvia de ideas, ya que permite agrupar los diferentes puntos de vista, ente caso hablamos del conocimiento empírico del área por parte de los representantes de los diferentes sectores, quienes tienen un conocimiento profundo de la geografía local, además permiten clasificar en bloques informativos las coincidencias y divergencias obtenidas.
Con respecto al modelo CANVAS, éste ha sido otra herramienta de excelente ayuda para el diagnóstico del destino, puesto que la misma ha logrado dar orden a las acciones a desarrollarse en el territorio. Se han identificado posibles segmentos de mercado en función de las actividades turísticas potenciales de la zona e identificar los grupos de interés en el destino. Además, dos actividades claves como lo son la socialización de la propuesta en todo el territorio y el establecimiento de alianzas estratégicas, estas son las acciones más importante en las cuales los actores que forman parte de la cadena de valor del cacao jugarán un papel sumamente importante para la construcción del Paisaje Cultural del Cacao, debido a su papel como activo como diseminadores de la propuesta en los distintos destinos, y que esto a su vez facilite la toma de decisiones consensuada entre los actores gubernamentales en el territorio. Se tiene un claro panorama de la obtención de fondos y las necesidades de inversión en el territorio para llevar a cabo una actividad turística sostenible, las asociaciones de mayor envergadura en la zona colaborarían con la implementación de facilidades turísticas dentro de sus centros de acopio de cacao, las principales haciendas y ranchos de la zona también proponen abrir sus puertas para los visitantes, mientras que las instituciones se comprometen en promocionar la propuesta, implementar una marca, siempre y cuando que a corto plazo se conforme un comité interinstitucional que se empodere de las acciones de la propuesta y colabore en la canalización de fondos nacionales e internacionales.
El modelo CANVAS ha sido utilizado durante mucho tiempo como una herramienta base para la presentación de ideas de negocio, en este caso su adaptación a las preguntas básicas que se genera un destino que quiere incursionar en el turismo, es eficiente, los participantes en los talleres realizados, se adaptaron rápidamente a la dinámica del llenado, teniendo un secretario que centralizaba las ideas que surgían para el llenado de los diferentes cuadrantes de la matriz, es muy adaptable a trabajos participativos, pero podría ser más eficiente, si se le adaptase una escala valorativa en varios de sus apartados con niveles inductivos de conocimiento, para tratar de hacer menos subjetiva la información.
Según las experiencias previas abordadas desde la revisión teórica y relacionada explícitamente a los paisajes culturales se tiene los trabajos realizados por Urte (2007), Ministerio de Cultura de la República Colombiana (2011) y Mayorga (2015) sobre el Eje Cafetero Colombiano, en ellas se constata una serie de lecciones aprendidas durante la puesta en marcha de este proceso, que van desde los problemas sociales básicos hasta relaciones complejas entre los actores públicos y privados, situaciones que tienden a repetirse a lo largo de las diferente realidades de los países latinoamericanos y, que se transforman en un gran reto para quienes emprenden la idea de consolidar el paisaje cultural del Cacao en Ecuador. Esta propuesta delineada inicialmente como un proyecto de investigación, ha tomado la fuerza necesaria para transformase en una potencial postulación, tomado como base la cultura y las principales motivaciones de los productores de la zona norte de la provincia de Manabí, alrededor del cultivo de cacao de la variedad fino y de aroma (Félix et al, 2021b). Mediante la realización de los talleres participativos se ha obtenido información importante de primera mano, que deberá ser estructurada en base a los requerimientos internacionales, para apostar por una declaratoria que eleve las posibilidades de alcanzar el desarrollo sustentable en esta región (UNESCO, 2021).
Los trabajos de Urte (2007), Ministerio de Cultura de la República Colombiana (2011) y Mayorga (2015) han mencionado sobre la importancia de la cohesión social, en especial lo relacionado a la interacción público- privado que debe existir entre los actores claves del territorio, esto coincide con los criterios de los participantes en los talleres, lo cual se contempla como uno de los grandes retos para cristalizar la presente propuesta, debido a el eterno divorcio entre las acciones intersectoriales llevadas a cabo en la zona. También otro punto a tomar en cuenta es lo relacionado a los problemas sociales que atraviesan las comunidades productoras donde se pretende intervenir y lo difícil que es para Colombia luego de ya varios años seguir convenciendo del trabajo colaborativo a los productores, esta labor se acrecienta mucho más en un territorio como el de la zona norte de Manabí en Ecuador, donde el turismo ha sido algo incipiente desde hace varias décadas. Por último un punto de conexión importante está representado por la puesta en marcha de grandes proyectos en alguno de los municipios de la zona norte para el mejoramiento de experiencias turísticas, tal es el caso del municipio de Chone que ha iniciado los estudios para el desarrollo del parque mundial del cacao, proyecto que pretende ser un emblema para la zona norte, así como se ha transformado los parques del café en Colombia y que las investigaciones contemplan como pilares fundamentales del desarrollo turístico.
En definitiva, las dos herramientas utilizadas durante el ejercicio participativo han demostrado su eficiencia para la obtención y agrupación de información cualitativa, todo esto alineado al enfoque constructivista de las IAP (Marti, 2000), donde han dejado información clave para continuar con la propuesta aterrizada a los criterios de los actores locales. La falta de datos e información oficial es una de las principales limitantes para las investigaciones, en término de turismo, dentro de la provincia, pero es algo que se debe de complementar con trabajos de campo y actualizaciones de bases de datos por parte de las instituciones gubernamentales.