INTRODUCCIÓN
La perforación de la úlcera péptica no es una patología de tiempos modernos1. A finales del siglo XVII, la úlcera péptica duodenal fue reconocida como patología2, y los primeros reportes de perforación documentados fueron descritos en 1.7462. En la actualidad, existen reportes en la literatura médica mundial que demuestran una disminución de la incidencia de la enfermedad ulcerosa péptica en países de primer mundo, no así en la incidencia de perforación3. Se reconoce que el desequilibrio entre los factores protectores tales como la motilidad gástrica, la secreción de moco, la secreción neuronal de factores inductores de la protección4 y los factores agresores, como la hipersecreción, el tabaquismo intenso, el alcoholismo y la exposición prolongada del ácido a la mucosa, están directamente relacionados con el desarrollo de úlcera péptica. Sin embargo, aún no se determinan los mecanismos por los cuales ya sean sistémicos o locales, una úlcera se perfora.
En esta época, en donde el uso y abuso de inhibidores de la bomba de protones (IBP) y antagonistas H23,5,6 deberían de disminuir la incidencia de úlceras perforadas, se especula que los efectos del tabaco, alcohol, antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) y prednisona, pueden ser determinantes para la perforación de una úlcera. Además de estos factores y a consecuencia de los cambios sociales, económicos y demográficos, existe el surgimiento de nuevos factores que condicionan la perforación. Tal es el caso del uso y el abuso de sustancias ilícitas, predominantemente la utilización crónica de cocaína y crack, principalmente por vía inhalada3,7,8.
OBJETIVO
Determinar los aspectos socio demográficos y clínicos en pacientes consumidores de crack con ulcera péptica perforada internados en la IICCQx del Hospital de Clínicas durante el periodo 2011-2016.
PACIENTES Y METODOS
En todo momento se preservo la privacidad y anonimato de los pacientes. En todos los pacientes el diagnostico se realizo en el intraoperatorio, fueron incluidos aquellos pacientes con diagnostico de ulcera péptica perforada internados en la IICCQX durante el periodo 2011-2016. Utilizamos variables como edad, sexo, ubicación y tamaño de la ulcera, consumo de crack. Los datos fueron asentados en planillas Excel y sometidos a estudios estadísticos.
RESULTADOS
La Prevalencia del consumo de crack en pacientes con ulcera péptica perforada es del 24% (4 casos). Pacientes no consumidores 76% (13 casos) (Figura 1). El 100% de los pacientes consumidores de crack eran de sexo masculino provenientes de Asunción y Gran Asunción.
El promedio de edad de presentación de ulcera péptica perforada en pacientes consumidores de crack es de 27 años. No consumidores 60 años. (Figura 2).
Ubicación de la ulcera péptica perforada en pacientes consumidores de crack: 3 casos en región pre pilórica, 1 caso en píloro. En no consumidores: 2 en región pre pilórica, 1 en duodeno, 1 en píloro, 5 en antro, 4 en curvatura menor (Figura 3). Todos los pacientes estudiados fueron sometidos a laparotomía exploradora, reavivamiento de bordes de la ulcera, rafia primaria y parche de epiplón.
Tamaño de las ulceras perforadas en pacientes consumidores de crack 4 casos menores o iguales a 0,5cm. En no consumidores, 4 casos menores o iguales a 0,5cm, 3 casos entre 0,5 y 1cm y 6 casos mayores a 1cm. (Figura 4). En todos los casos el diagnostico pre y pos operatorio fue de peritonitis generalizada por perforación.
DISCUSION
En nuestro trabajo reportamos 4 pacientes con antecedente de consumo de crack como factor de riesgo principal de un total de 17 casos que presentaron ulcera péptica perforada, lo que corresponde a una prevalencia del 24%, en todos los casos fueron pacientes de sexo masculino. En los artículos internacionales se reporta una prevalencia del 20% con el mismo factor de riesgo y siendo predominante el sexo masculino9,11)..
El promedio de edad encontrado es de 27 años en los pacientes consumidores de crack en nuestra serie, mientras que hallazgos reportados en la literatura reportan edades entre 27 y 34 años9,10,12.
La ubicación pre pilórica de la ulcera en pacientes consumidores de crack en este reporte fue predominante. En todos los casos la conducta quirúrgica fue reavivamiento de bordes de la ulcera, rafia primaria y parche de epiplón. Tanto la ubicación de la perforación comoLa conducta quirúrgica descripta en diferentes artículos coinciden con los resultados obtenidos en este reporte9,10,12,13.
El tamaño de las ulceras en los casos registrados en este trabajo en consumidores de crack es menor o igual a 5mm de diámetro y como hallazgo intraoperatorio una extensa contaminación peritoneal. Artículos relacionados reportan ulceras de hasta 5mm en pacientes con las mismas características, con contaminación peritoneal extensa y signos de peritonitis aguda generalizada9,12,13.
CONCLUSION
Los pacientes consumidores de crack con ulcera péptica perforada en la IICCQx del Hospital de Clínicas durante el periodo 2011-2016 corresponden a un grupo de pacientes adultos jóvenes de sexo masculino, procedentes de la capital y ciudades contiguas a la misma, con clínica de peritonitis aguda generalizada.