INTRODUCCIÓN
Los dermatofitos son un grupo de hongos ubicuos que tienen la capacidad de invadir e infectar piel, pelo y uñas, tanto del ser humano como de los animales1,2. Comprenden los géneros Microsporum, Trichophyton y Epidermophyton los cuales taxonómicamente se agrupan por sus características morfológicas, fisiológicas y antigénicas3. De acuerdo con su hábitat, los dermatofitos pueden clasificarse como zoofílicos, antropofílicos y geofílicos1.
Las micosis superficiales producidas por los hongos dermatofitos se denominan dermatofitosis o tiñas4. Se adquieren por contacto directo con humanos, animales o por objetos contaminados. Las dermatofitosis son enfermedades infecciosas de elevada prevalencia en América Latina y afectan tanto al hombre como a los animales domésticos6.
Los dermatofitos pueden convivir con los animales sin causar lesión, transformando a estos hospederos en portadores asintomáticos7. Varios estudios reflejan un aumento considerable de las dermatofitosis humanas por agentes zoofílicos y refieren la importancia epidemiológica de las mascotas debido al contacto cada vez mayor con el hombre. Esta convivencia frecuente y estrecha sería una de las razones que explicaría el incremento de infecciones humanas por dermatofitos8.
La búsqueda de dermatofitos en animales sanos puede contribuir a conocer la frecuencia de presentación de estos hongos en nuestro país y establecer con mayor precisión su importancia en la cadena epidemiológica9.
OBJETIVO
Aislar e identificar hongos dermatofitos en el pelaje de gatos asintomáticos del área metropolitana de Asunción.
MATERIALES Y MÉTODOS
El estudio fue observacional descriptivo de corte transverso, con tipo de muestreo no probabilístico de conveniencia.
Se tomaron muestras de pelos de 68 gatos domésticos asintomáticos pertenecientes a propietarios individuales en el área metropolitana de Asunción, entre diciembre de 2016 a febrero de 2017.
Las muestras fueron obtenidas con limpieza previa con alcohol al 70% utilizando el método de Mariat y Tapia10 que consistió en frotar al menos 4 veces un pedazo estéril de alfombra de material semisintético de 4 x 4 cm sobre el pelaje del animal, desde zonas de la cabeza y cuello y con otra alfombra de los miembros anteriores de los animales. Luego se depositó el pedazo de alfombra en sobres de papel madera para el transporte y se identificó con el nombre del propietario y del animal11. Las muestras se remitieron al laboratorio para su procesamiento, en un plazo no superior a 48 horas.
Los cultivos fueron realizados en Sabouraud glucosado con cicloheximida y cloramfenicol (agar Mycosel). Las muestras de pelos fueron sembradas por impresión, presionando suavemente la alfombra 2 a 3 veces sobre la superficie del agar para depositar las escamas y los pelos retenidos en ella, luego se retiró la alfombra del medio1. Los medios de cultivo se sellaron con cinta adhesiva12, se identificaron con los códigos correspondientes y se incubaron por un período de 21 días a una temperatura de 28 ºC, siendo examinados dos veces por semana13.
Identificación macroscópica y microscópica
La identificación de los hongos se basó en las características macroscópicas y microscópicas de las colonias. En el examen macroscópico se observó la velocidad de crecimiento, la textura, la forma, el color de las colonias, así como también la presencia de pigmentos en el anverso y reverso del cultivo1,4. Para la identificación microscópica a partir de las colonias se realizó un disgregado de éstas en un portaobjetos con una gota de azul de lactofenol para poder observar las estructuras de fructificación11. Además se utilizó la técnica de la cinta adhesiva para visualizar mejor las formas de reproducción14. Para la identificación fueron utilizados textos de referencia15-17.
Análisis estadístico
Los resultados se analizaron mediante la prueba de Chi cuadrado para verificar posibles asociaciones entre las variables sexo, edad, hábitat y frecuencia de aislamiento de los dermatofitos en gatos asintomáticos, con nivel de confianza del 95%. La significación para las pruebas se determinó a un valor de p <0,05.
RESULTADOS
Del total (n=68) de gatos, 38 (55,9%) eran hembras y 30 (44,1%) machos; 56 (82,4%) eran menores de cinco años y 12 (17,6%) gatos tenían igual o mayor a cinco años; 65 (95,6%) eran mestizos y 3 (4,4%) eran de raza pura. En cuanto al hábitat en el que viven, 13 (19,1%) viven en el interior de sus hogares (salida al exterior escasa), 28 (41,2%) en el exterior (poco o ningún tiempo dentro de las casas, más bien permanecen en el patio o explorando su territorio) y 27 (39,7%) permanecen tanto dentro como fuera de las casas.
Del total de muestras cultivadas (n=136), se obtuvo 19,1% del género Microsporum, de los cuales M. canis se aisló en 10 muestras (14,7%) y M. gypseum en 3 muestras (4,4%) (Figura 1 y Figura 2). No se detectaron diferencias significativas en cuanto al sexo, edad y la presencia del hongo. El número de aislamientos de M. canis y M. gypseum con las variables mencionadas se muestran en la Tabla 1.
DISCUSIÓN
M. canis es aislado más frecuentemente en gatos, lo que guarda relación con las frecuencias de aislamientos de este agente en gatos asintomáticos encontrados en Italia 14,6%18, Lituania 16%19, en ciudades de Argentina como Buenos Aires 17,3%20 y Mendoza 11,1%21. En Chile encontraron 60%6, 23,2%9 y ningún aislamiento11. En Brasil aislaron 18%22 y 5,8%23 similar a un estudio en México 4,4%24. Las diferencias en las tasas de aislamiento de M. canis, cuando se realizan en gatos asintomáticos pueden atribuirse a las diferentes técnicas de muestreo empleadas, factores como la estación del año, la temperatura ambiental, humedad, pluvimetría, las área geográficas y factores socioeconómicos9,25,26.
Los resultados de nuestro estudio concuerdan con los de Betancourt et al6, Cervantes- Olivares et al24 y López et al21 al no hallar diferencias significativas en la frecuencia de positividad según el sexo y la edad. Sin embargo, en otros estudios se registran la predisposición relacionada al sexo de los animales18,27. Ferreiro et al23 encontraron mayores probabilidades de aislamiento de M. canis en machos que en hembras. En cuanto a la edad en un estudio de Romano et al28 los gatos jóvenes, especialmente los menores de un año, mostraron una mayor prevalencia estadísticamente significativa de la presencia de M. canis que los animales mayores; Iachini y Madariaga20 tuvieron una diferencia significativa (p 0,014) comparando los animales menores de dos años (23/99) con los de dos años o más (4/54).
En cuanto al hábitat en el que viven, en el grupo que permanece preferentemente en el interior de sus hogares no hubo crecimiento de M. canis, con respecto al grupo que permanece en el exterior. No se encontraron diferencias significativas en cuanto al hábitat en los porcentajes de aislamiento. Al igual que en este estudio, Beraldo et al29 no encontraron relación entre el aislamiento de dermatofitos y la vida en el interior o en el exterior de las casas.
El porcentaje de aislamientos de M. canis obtenido en este estudio confirmaría la importancia que otros autores como Betancourt et al6, Ferreiro et al23 y Patel et al26 asignan a los gatos como un huésped natural y portadores sanos que actuarían como reservorios del hongo.
M. gypseum, otra especie dermatofítica que también posee distribución mundial, presenta un porcentaje de aislamiento que varía desde 0,6% a 14% en gatos asintomáticos y 1,56% a 5% en gatos con lesiones dérmicas13,20,23. Es la única especie geofílica con clara capacidad patógena para el hombre, aunque resulta poco habitual y puede transmitirse en forma clínica entre animales, entre humanos y entre animales y humanos13. Se menciona como responsable de una serie de casos de dermatofitosis en gatos y en brotes interespecíficos de gatos y humanos. M. gypseum ha sido descrito como causante de infecciones oportunistas en pacientes con el virus de inmunodeficiencia humana (VIH)8.
Mignon y Losson30 sugieren que la combinación de varios métodos incluyendo el examen clínico, la lámpara de Wood seguido de un examen microscópico directo de los pelos y un cultivo de éstos ayudan a especificar el estado de cada animal. En el caso de que el animal sea un portador transitorio asintomático, el número de colonias de M. canis aisladas resulta generalmente bajo y la repetición de cultivos durante varias semanas se vuelve negativa y el examen de la lámpara de Wood siempre permanece negativo.
CONCLUSION
Los gatos portadores de dermatofitos y los que no presentan lesiones cutáneas representan el mayor riesgo de contagio para los seres humanos y otros animales, por la falta de una presencia mínima de signos clínicos y no hay una debida prevención de contagio por lo que pueden ocurrir brotes en la familia. Los gatos producen un gran número de propágulos infecciosos23. La interrupción de la vehiculización y riesgo de infección se podría lograr a través de medidas realizadas por los propietarios, como un adecuado cepillado del pelaje, baños frecuentes, nutrición correcta y disminución del contacto con animales desconocidos9.
La importancia de este trabajo de investigación radica en la detección de posibles agentes causales de enfermedades zoonóticas como los dermatofitos del género Microsporum, para implementar un tratamiento adecuado y así poder prevenir posibles brotes de dermatofitosis en las familias con miembros susceptibles o vulnerables a padecer estas micosis, debido al estrecho contacto que tienen con sus mascotas, las cuales son portadoras de los dermatofitos aislados. Se considera de valor este trabajo para la Salud Pública debido a que aún no fueron realizadas publicaciones de esta índole en nuestro país.