INTRODUCCION
El Mg es el segundo catión más abundante en el compartimiento intracelular, es esencial en la transferencia, almacenamiento y utilización de energía 1. La ingesta recomendada varía en diferentes países. El Instituto de Medicina de Estados Unidos recomienda como adecuado 310-320 mg por día para las mujeres y 400-420 mg por día para los hombres. La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria sugirió como adecuado entre 300 y 350 mg por día para mujeres y hombres 2,3.
Las manifestaciones clínicas en pacientes con hipomagnesemia incluyen: trastornos neuromusculares (parestesias, debilidad, apatía, delirio, ansiedad, cefalea y coma), se puede encontrar además hipocalemia, hipocalcemia, hipoparatiroidismo, resistencia a la hormona paratiroidea. La depleción de Mg produce arritmias cardiacas como extrasístoles auriculares o ventriculares, taquicardia ventricular (torsades de pointes), fibrilación ventricular e induce cambios en el electrocardiograma, que generalmente reflejan una repolarización cardíaca anormal (ensanchamiento del complejo QRS, alteraciones de la onda T, prolongación del intervalo PR) 4.
La hipomagnesemia puede producir una variedad de anormalidades metabólicas y consecuencias clínicas. Se ha informado que un equilibrio adecuado de Mg reduce el riesgo de inflamación, diabetes, accidentes cerebrovasculares, cáncer y eventos de enfermedades 5.
Diagnosticar la hipomagnesemia requiere sospecha clínica, debido a que, la concentración plasmática de Mg no se mide en los análisis de rutina 6. Corregir el déficit de Mg contribuiría a reducir arritmias cardiacas, controlar la presión arterial, disminuir la resistencia a la insulina, el riesgo de síndrome metabólico, alteraciones del medio interno como la hipocalemia e hipocalcemia y la morbimortalidad por estas alteraciones 7.
En nuestro país no contamos con datos referentes a la hipomagnesemia, lo que justificó esta investigación.
OBJETIVOS
General: determinar la frecuencia y las características clínicas de la hipomagnesemia en pacientes internados en el Departamento de Medicina Interna del Hospital Nacional (Itauguá, Paraguay) en el período 2018 al 2019.
Específicos: describir las variables demográficas (edad, sexo), comorbilidades, cuadro clínico, hallazgos electrocardiográficos y laboratoriales (Mg, albúmina).
MATERIALES Y MÉTODOS
Se aplicó un diseño observacional, descriptivo, retrospectivo, de corte transversal. La población de estudio estuvo constituida por pacientes adultos de ambos sexos internados en el Departamento de Medicina Interna del Hospital Nacional (Itauguá, Paraguay) en el período 2018 al 2019.
Se incluyeron todos los pacientes con hipomagnesemia confirmada laboratorialmente, considerándose como tal todo Mg sérico ≤ 1,5 mg/dL. Para los pacientes que presentaron albúmina sérica <4 mg/ dL en forma concomitante, se realizó el cálculo de Mg con la siguiente fórmula:
Mg corregido (mEq/L) = Mg medido (mEq/L) + 0,01 X (40-albúmina g/L).
Se aplicó un muestreo no probabilístico por conveniencia. Se determinaron las siguientes variables: demográficas (edad, sexo), comorbilidades, cuadro clínico, hallazgos electrocardiográficos y laboratoriales (Mg, albúmina). Las variables fueron sometidas a estadística descriptiva con el programa Epi Info 7©. Las variables cualitativas se expresaron en frecuencias y porcentajes, y las cuantitativas en medias y desviación estándar.
Para estimar el tamaño de la muestra se utilizó el programa estadístico Epi Info 7©. Para un universo de 2650 pacientes internados en el Dpto. de Medicina Interna en el periodo 2018-2019, frecuencia esperada de hipomagnesemia de 16,4% 8, precisión del 5%, el tamaño mínimo calculado para un intervalo de confianza del 95% fue 195 pacientes.
Aspectos éticos: no se requirió consentimiento informado por tratarse de una revisión de expedientes médicos. Se respetó la confidencialidad de los datos personales. No existen conflictos de interés comercial. El protocolo fue evaluado por el Comité de Ética de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Itapúa (Paraguay).
RESULTADOS
Durante el periodo de estudio ingresaron en el Dpto. de Medicina Interna 2.650 pacientes, pero la muestra final se constituyó con 2.400 expedientes. Del total de sujetos incluidos, 8,2% (n=198) presentó hipomagnesemia, dentro de este porcentaje se incluyeron también los pacientes con hipoalbuminemia 9,09% (n=18) y Mg sérico corregido< 1,5mg/dL (Gráfico 1).
El rango de edades estuvo comprendido entre 18 y 92 años con una media de 55 ± 17 años. El 53% (n 105) fue del sexo masculino. Las comorbilidades encontradas con mayor frecuencia fueron la hipertensión arterial (63%) y diabetes mellitus (30%) (Gráfico 2).
Los escenarios en los que se constató hipomagnesemia fueron los siguientes: vómitos 34,34% (n 68), diabetes mellitus 30,30% (n 60), enfermedad renal crónica 16,67% (n 33), alcoholismo 13,64% (n 27), diarreas 13,64% (n 27), acidosis metabólica 10,61 (n 21), desnutrición 4,04% (n 4), enfermedad celiaca 0,51% (n 1) e hipoparatiroidismo 0,51 % (n 1). Considerando los fármacos que se encuentran asociados a la hipomagnesemia, el más frecuente fue omeprazol 97,98% (n 194) (Tabla 1).
De la totalidad de pacientes con hipomagnesemia, se encontró que 57,07% (n 113) de los pacientes presentó síntomas, siendo los más frecuentes: ansiedad 9,09% (n 18), espasmos musculares 8,08% (n 16) y cefalea en 6,06% (n 12). Las alteraciones electrolíticas detectadas fueron la hipokalemia 45,45% (n 90) e hipocalcemia 31,31% (n 62). Dentro de este porcentaje se incluyeron también los pacientes con hipoalbuminemia 9,09% (n 18) y calcio corregido <8,6 mg/dL (Gráfico 3).
Los hallazgos electrocardiográficos presentes en pacientes con hipomagnesemia en mayor frecuencia fueron la fibrilación auricular 11,11% (n 22) y trastornos de la repolarización con alteración del segmento ST 10,61% (n=21) y onda T negativa asimétrica 8,08% (n 16) (Tabla 2).
DISCUSION
La frecuencia de hipomagnesemia encontrada en este estudio (8,2%) fue superior a un estudio similar realizado en Grecia (4,7%) 8, pero muy inferior a los hallados en otros países: 16,4% en Perú 9, 20,1% en Estados Unidos 4 y 28,6% en España 10. Las diferencias pueden explicarse por los puntos de corte considerados para la hipomagnesemia y por las características heterogéneas de la población, así como del tamaño de las muestras y el tipo de estudio. No obstante, consideramos que la hipomagnesemia no debe soslayarse en nuestro Hospital y amerita nuevos estudios de tipo longitudinal para el seguimiento de los afectados. No debería menospreciarse la medición rutinaria de este catión por las consecuencias clínicas que puede acarrear su deficiencia 11.
Los escenarios clínicos hallados en los sujetos de esta muestra (vómitos, diarreas) corresponden a la fisiopatología de la hipomagnesemia, así como las comorbilidades detectadas diabetes mellitus, hipertensión arterial, enfermedad renal crónica). La fisiopatología de nuestros casos está relacionada con la homeostasis del Mg: la falta de ingesta y las pérdidas excesivas 12. Más del 99% del Mg total del cuerpo se encuentra en el espacio intracelular, almacenado en los huesos (60-65%), músculos y tejidos blandos (34-39%), mientras que menos del 1% se encuentra en el espacio extracelular. La forma más simple de evaluar la deficiencia de Mg es midiendo la concentración plasmática del mismo, pero se debe tener en cuenta que el 30% del Mg está ligado a la albúmina y que la mayor cantidad de Mg en el organismo está localizada en el compartimiento intracelular 1,13.
Las alteraciones electrocardiográficas encontradas en esta muestra (fibrilación auricular, trastornos de la repolarización y prolongación del QRS) coincide con la bibliografía 14. Está descrito que corregir la hipomagnesemia ayudaría a controlar la presión arterial 15, disminuir la resistencia a la insulina 16, prevenir o tratar arritmias cardiacas y otras alteraciones electrolíticas 17. Por todo ello se sugiere la monitorización sérica continua del Mg con la realización de electrocardiograma porque la hipomagnesemia puede ser causa de arritmias o empeorar las ya existentes, sobre todo en aquellos pacientes con riesgo cardiovascular y alteraciones electrolíticas concomitantes.
En los pacientes evaluados con hipomagnesemia se encontró una elevada frecuencia del uso de omeprazol, así como el uso de diuréticos y corticoides. La absorción del Mg ocurre en el intestino delgado debido a diferentes mecanismos de transporte: uno activo transcelular y otro pasivo o de difusión. Los inhibidores de la bomba de protones alteran esta absorción intestinal e igual fenómeno ocurre con los diuréticos de asa, las tiazidas, el cisplatino, el foscarnet y los aminoglucósidos. Por esto se aconseja el uso racional y el control periódico de los niveles séricos de Mg, además del Ca y K, en los consumidores crónicos de estos fármacos 18.
Las manifestaciones clínicas detectadas en esta muestra fueron ansiedad, espasmos musculares, cefalea, estreñimiento. Si bien la etiología de los mismos podría ser multifactorial como debido a las comorbilidades concomitantes, la hipomagnesemia podría ser la causa de estos síntomas 19. Lastimosamente, en este estudio no hubo seguimiento evolutivo de la desaparición de estos síntomas al corregir la hipomagnesemia.
Como limitaciones se debe mencionar que este estudio fue retrospectivo, no aleatorizado y monocéntrico, por lo que los resultados no pueden ser generalizados. Tampoco se registraron los niveles de Ca, K y PTH. No obstante, como fortaleza es la primera investigación sobre este en nuestro país, lo que permitirá concientizar a los médicos sobre la importancia de medir los niveles de Mg para evitar complicaciones 20.
En conclusión, la hipomagnesemia se detectó en 8,2% de los pacientes y se asoció a vómitos (34%), diarreas (13%), uso de omeprazol (97%), furosemida (31%) y corticoides (24%).
Contribución de los autores
Raúl Emilio Real y María Leticia Ferreira participaron en la concepción de esta investigación, en la recolección y análisis de datos, interpretación de los resultados y revisión crítica del contenido del artículo.
Todos los autores participaron en la aprobación final de la versión final del manuscrito y asumen la responsabilidad frente a todos los aspectos del manuscrito.
Financiación
Ninguna.
Conflicto de intereses
Los autores declaran que no tienen conflictos de intereses.