La Glomerulonefritis aguda es un término que define una lesión patológica, puede ser asintomática o manifestarse clínicamente como síndrome nefrítico agudo, síndrome nefrótico, o con una progresión rápida a la insuficiencia renal. La glomerulonefritis postinfecciosa (GNPI) comprende un gran grupo de glomerulonefritis que son causadas por agentes infecciosos siendo la más conocida y frecuente la glomerulonefritis aguda postestreptococcica(GNPS)1.
En las últimas décadas, se han producido cambios significativos en su epidemiología, basados en las características nefritógenas de antígenos estreptocócicos, y en la historia natural de la enfermedad. La incidencia de GNPI está en disminución en países desarrollados y la reducción en la incidencia de GNPS se atribuye a una variedad de factores, incluyendo un acceso más fácil y precoz de la atención y tratamiento médico de infecciones estreptocócicas y el uso generalizado de la fluoración del agua. En Europa central prácticamente ha desaparecido, asimismo en Chile desde 1999 y en algunas regiones de Venezuela. También se reporta en Florida EEUU una disminución en la incidencia y severidad de GNPS, sin embargo la GNPI y específicamente la glomerulonefritis aguda postreptocócica (GNPS) sigue siendo frecuente en niños de comunidades pobres con acceso limitado a la atención médica2-4.
La incidencia estimada de GNPI en niños oscila entre 9.5, 18 y 24.3 nuevos casos por cada 100000 personas. En mayores de 15 años es de 2 casos por cada 1000004-6.
La glomerulonefritis postinfecciosa es el resultado de una reactividad antígeno-anticuerpo.
Los complejos inmunes nefritógenos se forman en la circulación o, in situ, en la membrana basal glomerular (GBM) y provocan activación local del sistema del complemento y la cascada de coagulación.
Los riñones son particularmente susceptibles a la injuria mediada por el complemento, debido a su extensa superficie endotelial, elevado flujo sanguíneo, organización vascular y producción local de componentes del complemento. Hay dos grupos principales de enfermedades renales mediada por complemento
El primero está asociado con un aumento activación y consumo de complemento de la vía clásica y en ciertos casos la lectina. El segundo se caracteriza por desregulación del complemento e implica la vía alterna de complemento7.
En varios estudios se observó que la evolución de la GNPS fue favorable y los pacientes tuvieron buena recuperación del cuadro clínico inmediatamente (90 y 92%)8,9.
Wong y cols. mencionan que el diagnóstico tardío o la falta de diagnóstico es común en la población de niños estudiados con GNPS, lo que puede conducir a complicaciones y severidad del cuadro con mayor mortalidad y la morbilidad10.
La glomerulonefritis aguda post-estreptocócica es endémica entre los polinesios franceses y es considerada una población de alto riesgo. 6 Tienen al igual que en otros lugares alta incidencia de infecciones de la piel. En el estudio iraní observaron en el 96% antecedentes de faringitis o infección de vías respiratorias y fue 2,93 más frecuente en el sexo masculino 11.
Kilic y cols. refieren un 75% de antecedentes de infección de las vías respiratorias previo a la glomerulonefritis aguda y si bien el pronóstico de GNAPS en niños es bueno, las complicaciones sistémicas graves y la insuficiencia renal puede desarrollarse durante el período de seguimiento12.
En el estudio australiano evaluaron en una población aborigen con altas tasas de insuficiencia renal y enfermedad cardiovascular, si los episodios de GNPS aumentaban el riesgo enfermedad renal crónica en un futuro. Encontraron que el 18.7% haba tenido generalmente en la infancia al menos un episodio de GNPS asociado a infecciones de piel por estreptococos del grupo A, niveles más elevados de creatinina en mujeres, tasas de proteinuria y hematuria detectadas por tira reactiva e índice albuminuria/creatinuria más elevados, siendo el episodio de GNPS el determinante significativo de la insuficiencia renal13.
En este número de la revista el estudio epidemiológico, basado en una población hospitalaria, realizado por Troche y cols encontraron que la mayoría de los pacientes provenían del área rural, y vivían en malas condiciones con baja escolaridad. Las infecciones de piel fueron las más frecuentes sin encontrar relación con las estaciones del año, hubo predominio del sexo masculino y la evolución de los pacientes fue buena.
Si bien el pronóstico inmediato, en general es excelente en los niños, es perentorio establecer mecanismos de prevención a fin de evitar o disminuir la presentación de la enfermedad, orientadas a mejorar las condiciones de vida de la población, la consulta precoz y el tratamiento oportuno.