Introducción
Las enfermedades cerebrovasculares son todas las enfermedades en las que los vasos sanguíneos del cerebro están involucrados principalmente. Otras enfermedades que cumplen este criterio son las hemorragias subaracnoideas, disecciones arteriales, arteriopatía cerebral autosómica dominante con infartos subcorticales y leucoencefalopatía, malformaciones arteriovenosas, trombosis del seno venoso y vasculitis1.
Los tratamientos endovasculares son procedimientos mínimamente invasivos que se realizan dentro de los vasos sanguíneos y se pueden usar para tratar la enfermedad arterial periférica (PAD) que es un tipo común de problema vascular en la pierna, la aorta o la carótida. La enfermedad arterial periférica ocurre cuando estos vasos sanguíneos se estrechan o bloquean con placa con el tiempo, una condición conocida como aterosclerosis. El tratamiento intervencionista se vuelve necesario para la PAD cuando los síntomas de los pacientes, como dolor o pérdida de tejido, se desarrollan debido a la pérdida de circulación2,3.
La angiografía cerebral se utiliza para diagnóstico de enfermedad neurovascular primaria (por ejemplo, aneurismas intracraneales, malformaciones arteriovenosas, fístulas arteriovenosas durales, estenosis aterosclerótica, vasculopatía, vasoespasmo cerebral, accidente cerebrovascular isquémico agudo). También para planificación de procedimientos neurointervencionistas o asistencia intraoperatoria con cirugía de aneurisma, así mismo como imágenes de seguimiento después del tratamiento4,5.
Las enfermedades cerebrovasculares son importantes en nuestro medio teniendo en cuenta que entre los principales factores de riesgo se encuentran la hipertensión y la obesidad, de alta comorbilidad en Paraguay6, entre las principales patologías vistas se encuentran aneurisma y el accidente cerebrovascular que puede llegar a tener varias complicaciones, incluida la muerte7. Es por ello que se propone como objetivo principal de esta investigación determinar la frecuencia de los tratamientos endovasculares en patologías cerebrovasculares en el Instituto de Previsión Social con el fin de brindar un panorama epidemiológico y una aproximación al tratamiento endovascular.
Metodología
Fue un estudio observacional, descriptivo, temporalmente retrospectivo y de corte transversal. El muestreo fue probabilístico aleatorio simple. Se incluyó pacientes diagnosticados con patología cerebrovascular que consultaron en el Instituto de Previsión Social entre 2016 y 2019 y sometidos a estudio de imágenes. Se incluyó pacientes de ambos sexos, mayores de edad, con patología cerebrovascular que consultaron en el Instituto de Previsión Social a los cuales se les realizó algún tipo de estudio de imágenes por parte del Servicio de Medicina por Imágenes del Instituto de Previsión Social y que contaban con fichas clínicas completas para realizar esta investigación.
Variables sociodemográficos: sexo (hombre, mujer), edad (en años cumplidos). Datos clínicos: hallazgo anfiográfico (patología encontrada, ej: aneurismas, tumor, etc), motivo de consulta (qué lleva al paciente a la consulta, signos y síntomas), diagnóstico (criterio médico de acuerdo al hallazgo angiográfico), tratamiento (quirúrgico, conservador), comorbilidades (patologías asociadas o no al diagnóstico del paciente).
El tamaño de muestra fue calculado usando el paquete epidemiológico Epidat (Organización Panamericana de la Salud), teniendo en cuenta un nivel de confianza de 95 % y una frecuencia esperada tratamiento endovascular para patología neurológica del 12 %(8) y una precisión de 6 % se obtiene un tamaño de muestra mínimo de 113 pacientes9. Los datos fueron cargados en una planilla de cálculo para luego ser procesados con el paquete estadístico SPSS versión 26. Las variables categóricas fueron resumidas en forma de tablas de frecuencia y las cuantitativas con medidas de tendencia central y de dispersión. En todo momento se respetaron los principios de ética aplicados a la investigación. Se respetaron los principios de autonomía, beneficencia y no maleficencia y el de justicia. Se respetaron los principios de la declaración de Helsinki sobre trato ético a seres humanos.
Resultados
Consultaron 240 pacientes de los cuales se incluyeron 113 que se sometieron a tratamiento endovascular con lo que la frecuencia de este tratamiento en patologías cerebrovasculares fue de 47,08 %. El 60,2 % fueron mujeres. Las edades estuvieron comprendidas entre los 18 y los 81 años con una media de 54 ± 16 años y una mediana de 56 años. La edad más frecuente fue 64 años. El promedio de edad entre las mujeres fue de 56,2 años y el promedio de edad en hombres de 50,4 años. Estos datos demográficos se detallan en la Tabla 1.
En cuanto a los datos clínicos la Tabla 2 presenta los hallazgos más frecuentes en las angiografías. Se puede ver que los hallazgos más frecuentes fueron malformación arteriovenosa cerebral, angiografía normal y aneurisma. En la Tabla 3 se presentan los motivos de consulta más frecuentes fueron cefalea con 61,95 %, déficit neurológico con 7,08 %, alteración del sensorio 7,08 %, convulsión 2,65 %, accidente transitorio isquémico 2,65 %, control 2,65 % y parkinsonismo en el 1,77 %.
En cuanto a los diagnósticos se ve en la Tabla 4 que los más frecuentes son hemorragia subaracnoidea en el 41,59 %, angiografía normal en el 22,12 %, ACV hemorrágico en el 6,19 % y ACV isquémico en el 6,19 %, tumor cerebral en el 4,42 % y cefalea en el 4,42 %. En cuanto a las comorbilidades el 73,45 % tiene algún tipo de comorbilidades. Estas se detallan en la Tabla 5. En cuanto al tratamiento se ve en la Tabla 6 que los más frecuentes fueron angiografía con 34,51 %, embolización en el 33,63 %, clipado en el 8,85 %, colocación se Stent 1,77 %.
Discusión
En total 113 pacientes han recibido tratamiento endovascular para tratar alguna patología cerebrovascular con lo que la frecuencia de los tratamientos endovasculares en patologías cerebrovasculares fue de 47,08 %, esto es mayor al porcentaje reportado por otras investigaciones donde la frecuencia es de 12 % 12 %8. En esta investigación la mayor parte de los pacientes fueron mujeres esto está en concordancia con investigaciones similares donde la mayor frecuencia se reporta en mujeres10. Existen muchas incógnitas en lo que respecta al papel del sexo en la fisiopatología y el tratamiento del accidente cerebrovascular isquémico agudo. Esto es particularmente cierto para el tratamiento endovascular (EVT). Evaluar el papel del sexo y el género como variables aisladas es un desafío porque están estrechamente entrelazados entre sí, así como con los antecedentes culturales, étnicos y sociales de los pacientes11.
Los diagnósticos más frecuentes fueron hemorragia subaracnoidea ACV hemorrágico, ACV isquémico tumor cerebral y cefalea. Los tratamientos más frecuentes fueron angiografía, embolización, clipado y colocación se Stent. Este conjunto de diagnósticos y que el principal diagnóstico sea de accidente cerebrovascular está en concordancia con investigaciones epidemiológicas realizadas en la región12.
Las comorbilidades también están acordes a la distribución de edad, puesto que es de esperarse que pacientes con 50 años aproximadamente presenten este tipo de patologías, sobre todo dadas las altas frecuencias de factores de riesgo en la población paraguaya6.
La colocación de stents endovasculares y la remodelación han sido los métodos principales para tratar varios tipos de estenosis u oclusión cerebrovascular. Dichos métodos apuntan principalmente a restaurar el suministro de sangre local mediante la remodelación de los vasos estrechos, lo que previene el accidente cerebrovascular isquémico13-16. El tratamiento endovascular ha demostrado ser útil para este tipo de patologías al igual que lo reportado por otros autores17,18.
La imagenología es fundamental en este grupo de patologías, puesto que los hallazgos de imágenes de los exámenes de la cabeza brindan evidencia temprana importante que respalda el diagnóstico de diversas lesiones cerebrovasculares, como estenosis, oclusión y malformación19,20. Esto demuestra la importancia fundamental de este tipo de investigaciones.
El tratamiento endovascular de las enfermedades cerebrovasculares es una operación mínimamente invasiva en numerosas lesiones cerebrovasculares (estenosis, oclusión, disección arterial, aneurisma, etc.). La implantación de stents y balones en el sitio de la lesión puede aliviar la estenosis vascular, mejorar la reforma vascular y restaurar rápidamente el suministro de sangre al cerebro en comparación con los medicamentos tradicionales21,22.
Sin embargo, persiste una serie de complicaciones potenciales con el uso de esta técnica quirúrgica, como la reacción del seno carotídeo, el síndrome de hiperperfusión, la hemorragia intracraneal y la colocación de stent - reestenosis, entre otros. Independientemente de si los pacientes cumplen con la medicación regular contra la placa, la ubicación del stent y la extensión de la estenosis determinan la incidencia de complicaciones después de la cirugía. En resumen, las tecnologías quirúrgicas avanzadas, la enfermería perioperatoria y el seguimiento posoperatorio son elementos importantes en la prevención de complicaciones quirúrgicas23.
La utilidad de esta investigación es dar a conocer las patologías que pueden tratarse de forma mínimamente invasiva a través del tratamiento endovascular en un grupo de patologías de gran repercusión en salud pública. Es una de las primeras investigaciones epidemiológicas que describen el uso de este tipo de tratamiento para las patologías cerebrovasculares.
Entre las limitaciones de esta investigación se puede mencionar que la principal es que no se utilizó un muestreo de tipo probabilístico, lo que implica que no se pueden extrapolar los datos. Estudios de seguimiento longitudinales son recomendados para continuar con los aportes de esta investigación.