INTRODUCCIÓN
El Asma es una de las enfermedades crónicas, más frecuente en pediatría, caracterizada por episodios recurrentes de sibilancias, disnea, opresión torácica y tos. Adquiere una enorme repercusión no solo a nivel individual y familiar, sino también a nivel social y económico1,2.
El asma tiene un protocolo de tratamiento Inter crisis (preventivo) que permite disminuir las crisis, controlar los síntomas, mantener una actividad física y una función pulmonar normal, así como prevenir las exacerbaciones2.
El diagnóstico correcto del asma evita el exceso terapéutico3. Además, está claro que el costo que implica esta enfermedad, aumenta drásticamente a medida que disminuye el control de la misma, y, se podrían obtener ahorros sustanciales a través del manejo adecuado de los pacientes asmáticos4.
Si bien existen protocolos enfocados en el seguimiento de estos pacientes, la falta de cumplimiento influye en la evolución de la enfermedad. Las causas por las cuales los pacientes no realizan un tratamiento de sostén adecuada son multifactoriales. La insuficiente educación a los pacientes, la mala técnica de inhalación y la mala adherencia del tratamiento son algunas de ellas. Esta última es responsable del 38,8% de la derivación de pacientes con Asma crónica. Además, juegan un papel importante la desinformación de los padres o encargados, negación del diagnóstico, y los factores socioeconómicos considerando el costo del tratamiento5.
En la población de niños con asma existen factores de riesgo de exacerbaciones de las crisis, entre los que se encuentran la atopia, la capacidad de incrementar la respuesta de la IgE a alergenos ambientales las infecciones respiratorias virales, el humo del cigarrillo, la polución del aire y las dietas6.
El objetivo del presente trabajo fue describir las características del seguimiento y el uso de medicación profiláctica en pacientes asmáticos de 6 a 12 años de edad, de un hospital pediátrico de referencia.
MATERIALES Y MÉTODOS
Diseño y lugar del estudio: Estudio observacional descriptivo de asociación cruzada, prospectivo llevado a cabo en el departamento de Emergencias Pediátricas (DEP) del Hospital Pediátrico Niños de Acosta Ñu, en el periodo comprendido entre el 1 de mayo al 30 de setiembre del 2019.
Población y reclutamiento: por medio de un muestreo probabilístico de casos consecutivos, fueron incluidos en el estudio niños de 6 a 12 años de edad con diagnóstico de Asma que acudieron al DEP por exacerbaciones del cuadro (crisis asmática). Fueron excluidos los pacientes con otra enfermedad pulmonar de base, como EPOC o Fibrosis quística.
Se confeccionó un cuestionario con preguntas abiertas y cerradas, que los padres o encargados de los pacientes debían llenar previo consentimiento informado verbal.
Variables estudiadas: edad, sexo, procedencia, seguimiento del paciente asmático, causa de falta de seguimiento, antecedentes familiares de Asma, clasificación de la gravedad de la crisis asmática, internaciones por Asma, tratamiento preventivo, tipo de tratamiento preventivo.
Definición de las variables
Asma: enfermedad respiratoria crónica definida por una inflamación de las vías aéreas que se asocia con un aumento en la hiperreactividad de las vías aéreas que conduce a episodios recurrentes de sibilancias, disnea, opresión torácica y tos1.
Crisis asmática: empeoramiento agudo o subagudo de los síntomas y la función pulmonar del estado habitual del paciente7.
Clasificación de la severidad de la crisis: se utilizó el Pulmonary Index Score (PIS), que tiene en cuenta los siguientes parámetros: frecuencia respiratoria, sibilancias, relación Inspiración/Espiración, uso de músculos accesorios, saturación de oxígeno, considerando como crisis leve: PIS < 7, moderada PIS: 7-11 y Grave: PIS >12.
Cálculo de tamaño de la muestra: para conseguir una precisión del 3 % en la estimación de una proporción, mediante un intervalo de confianza del 95%, con corrección para poblaciones finitas, asumiendo que, la proporción esperada es del 3% y que el tamaño de la población es de 110000, fue necesario incluir 133 pacientes.
Procesamiento y análisis de los datos
Los datos fueron analizados con SPSSv21 utilizando estadística descriptiva. Las variables cuantitativas se expresaron en medias con desvío estándar o en medianas según la distribución. Las cualitativas se expresaron en porcentajes. La asociación de variables cualitativas se realizó por la prueba de chi cuadrado. Se consideró un error alfa de 5%.
El protocolo fue aprobado por el comité de ética de la institución con el consentimiento informado de los padres de los participantes
RESULTADOS
Cumplieron los criterios de inclusión, 133 pacientes con diagnóstico de Asma, que consultaron en el DEP en el periodo de estudio. Las características demográficas, y la clasificación del Asma se observa en la Tabla 1.
Edad (años) | ||
Media (DE) | 8,3± 2 | |
Sexo | N | (%) |
Masculino | 64 | 48.1 |
Femenino | 69 | 51.9 |
Procedencia | ||
Asunción y Gran Asunción | 125 | 93.9 |
Dpto. Central | 6 | 4.5 |
Otros Dptos. | 1 | 0.8 |
Severidad de la crisis | ||
Leve | 77 | 57.9 |
Moderada | 51 | 38.3 |
Grave | 5 | 3.8 |
El 32,3% (43/133) de los pacientes iniciaron seguimiento (controles periódicos), sin embargo el 6,9% (3/43) tenían un seguimiento irregular y el 4,6% (2/43) lo abandonaron después de un tiempo.
De los pacientes en seguimiento regular, n=38 el 10,5% (4/38) no recibían la medicación en forma regular.
El 71,4% (95/133) pacientes no tenían seguimiento. Respecto a los motivos que llevaron a la falta de seguimiento, se detallan en la Tabla 2
Causas | N (%) |
Desconocimiento de la necesidad de seguimiento | 67 (70.5) |
No lo consideraban necesario | 16 (17.8) |
Las crisis eran poco frecuentes | 7 (7.3) |
Problemas con el turno | 3 (3.1) |
Falta de tiempo | 2 (2.1) |
Los antecedentes familiares de asma, el seguimiento con especialistas y los antecedentes de hospitalizaciones por exacerbaciones se observan en la Tabla 3
N | % | |
Antecedentes familiares de Asma | ||
SI | 65 | 48,9 |
NO | ||
Familiar con Asma | ||
Materno | 30 | 22,6 |
Paterno | 15 | 11,3 |
Hermanos | 20 | 15 |
Consulta con especialistas (Neumólogo, alergólogo) | ||
SI | 38 | 28,5 |
NO | 95 | 71,5 |
Internaciones por Exacerbación | 77 | 57,9 |
En cuanto al tratamiento profiláctico utilizado se describe en la Tabla 4. (n=34).
DISCUSIÓN
En el presente trabajo se observó que más de la mitad de los pacientes que consultaron en el Departamento de Emergencias del Hospital General Pediátrico Niño de Acosta Ñu presentaron crisis asmática leve. Hubo predominio del sexo femenino. Estos datos coinciden en relación al sexo con lo reportado por Zapata Martínez y cols en el año 2008 en el Instituto Superior de Ciencias Médicas de La Habana en donde observaron que el 65.1% de los pacientes con asma eran mujeres8.
Referente al seguimiento se observó que 1 de cada 3 pacientes incluidos en el estudio, tenía seguimiento por especialistas (Neumólogo o Alergista), y que un tercio de los mismos recibían algún tipo de medicación profiláctica, esta cifra es inferior al 53,4 % sin seguimiento reportado por el estudio los de Zapata Martínez y cols8.
El asma, por su cronicidad y complejidad amerita un tratamiento integral, en el cual el conocimiento de médicos, pacientes y familiares sobre ella permitirá la concordancia, adherencia al tratamiento y seguimiento adecuado. En el presente estudio la falta de seguimiento de pacientes asmáticos, desde la perspectiva de sus padres o encargados, se debió a la falta de información acerca de la enfermedad. Coincidiendo con lo reportado por Kassise y cols quienes encontraron que el fracaso en el seguimiento de los pacientes asmáticos se relaciona a una educación sanitaria deficiente9.
Para el seguimiento de estos pacientes es necesario tener bien claras las características de esta enfermedad y los signos alarma. La valoración de los pacientes desde el punto de vista psicológico es muy importante porque influye en el reconocimiento de los síntomas, el manejo diario, al seguimiento y los resultados de la enfermedad10.
Por otro lado desde hace más de una década se conoce que la predisposición genética principalmente materna, junto con la exposición a alergenos son factores implicados en el desarrollo del asma11. En el presente estudio se encontró que casi la mitad de los participantes tenían antecedentes familiares de Asma, la mayoría maternos. Cifras cercanas a lo reportado por Berbesi y cols en Colombia, quienes encontraron que el 60% de los pacientes asmáticos tenían antecedentes familiares de asma12.
Más de la mitad de los pacientes que ingresaron al estudio, tenían antecedentes de internaciones por Asma, lo que podría deberse a la poca adherencia al tratamiento o la falta de información sobre la misma, lo que coincide con las Guías GINA para el Asma actualizado en el 2019, que refiere que más del 50% de los niños que padecen Asma no toman los medicamentos según se los recetó o la administración es incorrecta y recalca que la mala adherencia, contribuye a un control deficiente de los síntomas, a la aparición de exacerbaciones y al mayor riesgo de internaciones7. En este trabajo no se encontró relación entre profilaxis e internaciones. En un debate multidisciplinario realizado en España en el año 2016 encontraron que los factores desencadenantes del mal control del asma más frecuentes son: la insuficiente educación a los pacientes, la mala técnica de inhalación y la mala adherencia del tratamiento5. Por otro lado se conoce que aunque el tratamiento sea adecuado, muchas veces la respuesta al mismo puede variar debido a las diferentes variables genéticas reconocidas en el asma13.
Las medicaciones profilácticas más utilizadas fueron los corticoides inhalados, seguido de una terapia combinada entre corticoides inhalado y modificadores de leucotrienos (Montelukast), que coincide en parte con las guías GINA para el Asma, actualizado en 2019, que describe que los corticoides inhalados son los antiinflamatorios más eficaces para el asma, en cambio recalca que cuando una dosis intermedia de corticoides inhalado como monoterapia o terapia combinada con modificadores de leucotrienos, no logra un buen control del Asma la adición de un broncodilatador agonista β2 de acción prolongada (formoterol, propionato de fluticasona/salmeterol) al corticoide inhalado mejora los síntomas y la función pulmonar reduciendo las exacerbaciones en un mayor número de pacientes y más deprisa que la duplicación de la dosis del corticoides inhalado7.
Debido al enfoque del presente estudio, se considera una limitación, el hecho de que se evaluó el seguimiento de los pacientes, no así, la calidad de los mismos, así como tampoco se ha profundizado en las causas de la falta de seguimiento. Todos los pacientes asmáticos deberían tener un seguimiento a largo plazo, para tener mejores resultados.