INTRODUCCIÓN
La enfermedad por SARS-CoV-2 (COVID-19) ha tenido gran impacto en nuestro país, tras haber marcado presencia en todo el mundo a partir de los últimos días del año 2019 en donde se identificó a un nuevo coronavirus, el SARS-CoV-2, causante de la enfermedad COVID-19.
Los coronavirus pertenecen a la familia Coronaviridae, se describen cuatro géneros alfa, beta, gamma y delta. El SARS-CoV-2 pertenece al β-coronavirus, con un genoma muy idéntico al coronavirus de murciélago, sugiriendo al murciélago como huésped natural, además utiliza el mismo receptor, la enzima convertidora de angiotensina 2, que es el SARS-CoV-2.
Los síntomas se desarrollan en un intervalo de 3 a 7 días después del contagio, hasta 14 días. Los síntomas más comunes pueden incluir fiebre, secreción nasal, dolor de garganta, tos, fatiga, dolores musculares, dificultad respiratoria, expectoración, hemoptisis y diarrea.
La pandemia por SARS-CoV-2 produjo altas tasas de mortalidad en pacientes según edad, en especial en los adultos mayores hospitalizados, caracterizado por su contagio directo, aparición de neumonía grave y peor evolución en los mismos o en pacientes con factores de riesgo asociados como hipertensión, obesidad, diabetes o inmunosupresión. Hasta principios de mayo del 2022, fueron confirmados más 510 millones de casos de COVID-19 alrededor del mundo, con más de 6,2 millones de muertes asociadas.
El Hospital Regional de Ciudad del Este, Paraguay, constituyó uno de los centros de mayor complejidad en atención de los pacientes infectados por COVID-19. El objetivo de este trabajo fue caracterizar los factores de riesgos sociodemográficos y clínicos de los pacientes fallecidos por COVID-19 en este centro en periodo 2021-2022.
MATERIAL Y MÉTODOS
Se realizó un estudio observacional, descriptivo, retrospectivo, de corte transversal con muestreo no probabilístico.
La población del estudio estuvo constituida por pacientes fallecidos que fueron atendidos en el pabellón de enfermedades respiratorias del servicio de Medicina Interna y Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Regional de Ciudad del Este, Paraguay, abarcando el periodo comprendido entre enero de 2021 a junio de 2022.
Para el reclutamiento de los datos se solicitaron autorización a las autoridades de la institución, se recolectaron los datos mediante la revisión de las historias clínicas y el sistema informático de epidemiología en donde se obtuvieron los resultados laboratoriales de la reacción en cadena de la polimerasa con reverso transcripción (RT-PCR) de muestras obtenidas a través del hisopado nasofaríngeo.
El instrumento de recolección de información contenía variables sociodemográficas (edad, sexo), factores de riesgo, mortalidad y área de hospitalización. La muestra estudiada comprendió la totalidad de los pacientes fallecidos con resultado positivo de RT-PCR para SARS-CoV-2. Se utilizó un muestreo por conveniencia.
Los datos fueron tabulados en una hoja de cálculos del programa Microsoft Excel®, y sometidos a estadística descriptiva.
En la presente investigación respetaron las normas éticas y los principios básicos de la Bioética como el principio de respeto a las personas, principio de beneficencia y principio de justicia. No fue necesario un consentimiento informado pues al ser retrospectivo, se realizó revisión de fichas clínicas.
RESULTADOS
Se encontraron 844 expedientes de pacientes que dieron positivo a la infección por coronavirus y se reclutó a 328 (38,86%) pacientes fallecidos y que cumplieron con los criterios de inclusión. De ellos, 209 (63,72%) presentaron algún factor de riesgo demostrable. Las características demográficas se describen en la tabla 1.
Características demográficas | Frecuencia | Porcentaje |
---|---|---|
Sexo | ||
Femenino | 142 | 43,29% |
Masculino | 186 | 56,71% |
Grupos etarios | ||
15 a 19 años | 2 | 0,61% |
20 a 39 años | 19 | 5,79% |
40 a 59 años | 108 | 38,72% |
>60 años | 199 | 60,67% |
El factor de riesgo más frecuente fue la hipertensión arterial (tabla 2).
Factores de riesgo | Frecuencia | Porcentaje |
---|---|---|
Hipertensión arterial | 118 | 56,46 % |
Diabetes | 108 | 51,67 % |
Obesidad | 48 | 22,97 % |
Cardiopatía crónica | 45 | 21,53 % |
Enfermedad pulmonar crónica | 24 | 11,48 % |
Asma bronquial | 9 | 4,3 % |
Enfermedad renal crónica | 7 | 3,35 % |
Inmunodeficiencias | 6 | 2,87 % |
Enfermedad hepática crónica | 1 | 0,47 % |
Enfermedad neurológica crónica | 1 | 0,47 % |
Otros | 9 | 4,31 % |
De los 328 pacientes que fallecieron, 43 (13,11%) estuvo internado en Unidad de Cuidados Intensivos y 285 (86,89%) en sala de internación de Clínica Médica.
DISCUSIÓN
Durante el tiempo de estudio se revisaron 844 fichas clínicas de pacientes internados por COVID-19, en donde se registró que 38,86% falleció. Este porcentaje es similar a otro estudio realizado en Paraguay por Mereles E et al (4 en donde 43,8% de los pacientes fallecieron. Asimismo, es similar al estudio realizado en Perú por Vences MA et al9 en donde la mortalidad incluso fue un poco mayor (46,4%), a diferencia de un reporte realizado en México por Juárez K el al10 quien informó de 84,3% de pacientes no sobrevivientes. Con estos resultados se demuestra la alta mortalidad, sobre todo en pacientes con factores de riesgo. Las diferencias entre todos estos reportes pueden explicarse por el acceso a la tecnología y los protocolos de tratamiento utilizados en los diferentes países, lo que hace que estas muestras sean heterogéneas y las comparaciones de mortalidad no sean comparables.
En cuanto al sexo y la edad de los fallecidos, predominó el masculino (56,71%) y del rango etario mayor a 60 años (60,67%). Estas características también presentaron la mayoría de los fallecidos en el estudio realizado en Paraguay por Mereles E et al (4, en Perú por Vences MA et al9y en México por Juárez K et al10. En Asia, Albitar O et al11) reportó que 80% de los fallecidos eran mayores de 65 años, así como en El Salvador, donde Franco V et al8) halló que 69,8% de los fallecidos fueron hombres y 50,7% con edades entre 40 a 59 años. Estas tendencias de mayor mortalidad en sexo masculino y en sujetos añosos fue descrito en largas series en todo el mundo 12-14.
En cuanto a los factores de riesgo clínico en los pacientes fallecidos se constató que 63,72% de los mismos presentaba algún de ellos, siendo los más frecuentes, la hipertensión arterial (55,46%), diabetes mellitus (51,67%) y obesidad (22,97%). Estos factores son semejantes a un estudio que se llevó a cabo en México en donde Salinas J et al15 refirió que, en el grupo de los no sobrevivientes, 34,1% padecía diabetes mellitus, 39,9% hipertensión arterial y 19,8% obesidad. En El Salvador, Franco V et al8) refirió que los fallecidos concomitantemente adolecían de otras condiciones crónicas de salud que se distribuyeron en hipertensión arterial (28,5%) y diabetes mellitus (24,6%). En México, Hidalgo D 16 identificó cuatro comorbilidades que acompañaban a la mortalidad por COVID-19: obesidad, hipertensión, diabetes e insuficiencia renal crónica. Todos estos factores de riesgo clínico descritos a nivel mundial posiblemente contribuyeron al óbito por asociarse a mayor respuesta inflamatoria y complicaciones de las comorbilidades o infecciones asociadas a la internación 17-20.
El 13,11% de los pacientes fallecidos se encontraban en Unidad de Cuidados Intensivos. Muchos pacientes ingresados a esta área ya se encontraban utilizando ciclador respiratorio en sala de internados debido a la falta de camas disponibles en Cuidados Intensivos. Otro inconveniente suscitado en esa pandemia fue la falta de disponibilidad de especialistas capacitados en terapia intensiva. En Paraguay, al inicio de la pandemia, la mortalidad fue 5% y se relacionó a la obesidad 21. En Perú, Vences M et al9 reporta que solo 4,7% de los pacientes fallecidos fueron en terapia intensiva. Lastimosamente en esta muestra no se describe el tratamiento recibido. Se ha visto en el país que a los pacientes <65 años, la mortalidad en los que recibieron dexametasona fue 15,8% mientras que los que recibieron metilprednisolona no fallecieron (p 0,03). En el grupo de ≥65 años la mortalidad de los recibieron dexametasona fue 29,4% vs. 21,4% (p 0,7) en los que recibieron metilprednisolona 22.
Las limitaciones de esta investigación son la falta de datos relacionados a la gravedad del COVID-19 de los sujetos incluidos, otros estados de inmunosupresión, así como datos laboratoriales de los mismos. Tampoco se describió la causa exacta de la muerte, los días de internación, el tratamiento recibido y el estado vacunal de los pacientes reclutados. De esta manera con este estudio se podría plantear realizar estudios analíticos más profundos para descubrir con mayor precisión las causas y, por ende, mejorar el número de sobrevivientes.
En conclusión, se encontró un porcentaje elevado de fallecimiento por el SARS-CoV-2 en los pacientes internados en el Hospital Regional de Ciudad del Este, que predominó en edades avanzadas y en el sexo masculino. Los factores de riesgo más frecuentes fueron la hipertensión arterial, la diabetes mellitus y la obesidad.